El telonero
Doblado el Cabo de Hornos de la campaña no somos pocos los valencianos que nos preguntamos cuál es realmente el candidato del Partido Popular a la presidencia de la Generalitat. No es una pregunta retórica. Basta con constatar el absoluto protagonismo que ha asumido el ministro Zaplana durante estos días y el irrelevante papel de secundario al que ha relegado a Francisco Camps, condenado a ser el telonero de quien tiene el mando del poder en sus manos con el que confecciona candidaturas, distribuye regalías, afectos y distingue con privanzas. Un par de ejemplos para constatar la evidencia: En el páramo de Mestalla Camps actuó de telonero del telonero de Aznar y una rápida ojeada a la corte que acompaña al delfín evidencia hasta qué punto está secuestrado por lo más granado y aguerrido del zaplanismo.
Con semejantes antecedentes es lícito y obligado el preguntarse cuál será el grado de autonomía del que dispondrá Camps en el hipotético supuesto de alcanzar la presidencia. Es claro que el que se presenta por persona interpuesta, quien lleva la campaña y quien manda y mandará es Zaplana. Camps, como ahora José Luis Olivas, no dejará de ser un mandado aherrojado por el grupo parlamentario popular en las Cortes. ¡Y éste es el hombre que promete a los valencianos el máximo grado de autogobierno y el que afirma que a nacionalista no le gana nadie! Podría empezar por autogobernarse él. Sería un buen comienzo. De momento es un actor secundario que debe conformarse con el triste papel de telonero.
Segundo Bru es portavoz del PSOE en las comisiones de Economía y Presupuestos del Senado.
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