La OPEP aumentará sólo en 800.000 barriles su producción de crudo

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) hace gestos para frenar la desbocada carrera al alza del precio del petróleo. La producción diaria de 800.000 barriles más de crudo a partir del 1 de octubre acordada ayer, y que hoy se hará oficial, tiene como objetivo reducir el precio desde los 32,7 dólares por barril de brent (crudo de referencia) hasta encajonarlo en una banda entre 22 y 28 dólares. Los analistas creen que se trata de una ineficaz propina de 90.000 barriles diarios para "blanquear" la actual producción.

La producción real de 10 de los 11 países de la OPEP que participan del sistema de cuotas (Irak está excluido) era, a finales de agosto, de 26,1 millones de barriles, cercana a los 26,2 millones que resultan de añadir los 800.000 barriles acordados ayer a los 25,4 millones pactados desde el 1 de julio. Por tanto, la medida no traerá grandes alivios para los Gobiernos de los países industrializados y los consumidores, a no ser que tenga "efectos psicológicos" en la marcha de los precios, según los analistas. La OPEP reclamó ayer a los países ricos que contribuyan a frenar los precios atenuando la presión fiscal sobre los carburantes. Sin llegar a esa reducción nominal de impuestos, el Gobierno español se comprometió ayer a congelar el año que viene los tributos sobre los carburantes. Si se mantienen los gravámenes actuales, en lugar de ajustarlos según la inflación prevista (2%), se evitará un "encarecimiento fiscal" del litro de gasolina de 1,34 pesetas, lo que constituye "una forma de bajar los impuestos", aseguró el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. La crisis de las gasolineras y las refinerías, iniciada en Francia, remite en ese país, pero se extiende en el Reino Unido y Bélgica. Camioneros y agricultores bloquearon varias refinerías británicas, mientras Bruselas se colapsó por una manifestación de transportistas.