Chaves anuncia un otoño político caliente con los debates sobre el Estatuto y fiscalidad ecológica

Los socialistas creen que el presidente de la Junta no piensa adelantar las elecciones

SevillaSevilla - 25 abr 2003 - 00:00CEST

El Gobierno andaluz presentará para su debate en el último tramo de la legislatura, después del verano, dos de sus proyectos políticos más ambiciosos: la posible reforma del Estatuto de Autonomía y la ley de Fiscalidad Ecológica. Dado la premura de plazos -si el Parlamento apura hasta el último día su mandato legal, el tope para la convocatoria de elecciones autonómicas es el 11 de marzo de 2004- y la envergadura política de ambos asuntos es muy probable que ninguno prospere. No obstante, el anuncio de Manuel Chaves de un otoño político caliente, hace pensar a algunos socialistas que el presidente de la Junta descarta el adelanto electoral.

Manuel Chaves se comprometió ayer durante la sesión de control en el Parlamento a presentar después del verano sus propuestas sobre la "posible" reforma del Estatuto de Autonomía, una de las iniciativas más arriesgadas del presidente de la Junta que él mismo plantea no como una meta en sí misma, sino como fruto de un amplio debate político y social dentro de lo que denomina segunda modernización.

A una pregunta del portavoz de IU, Antonio Romero, Chaves exhibió la extremada prudencia que siempre ha mantenido respecto a la modificación estatutaria, consciente de que "nunca puede ser una iniciativa unilateral, sino que tiene que ser consensuada". Chaves no aportó novedades sustanciales respecto a su posición, pero el dato de que la presentará en otoño, en la misma etapa que la ley de Fiscalidad Ecológica, hace pensar a algunos socialistas que el presidente de la Junta plantea un final de legislatura muy cargado y que es un síntoma claro de que no contempla el adelanto de las elecciones autonómicas. Por el momento es sólo una percepción de algunos dirigentes, porque Chaves se muestra absolutamente hermético sobre una competencia que recae exclusivamente en él, lo cual no quiere decir que no circulen las opiniones de pasillo en el PSOE. Cuando públicamente se le ha preguntado siempre ha dicho que quiere agotar la legislatura.

Ante el reproche de Romero de que Andalucía juega "un papel secundario" en el debate abieto en España, Chaves aseguró que "el punto de referencia no puede ser la reforma vasca o catalana", sino que tiene que ser "los contenidos y los tiempos" que se marque la comunidad en función de sus necesidades. Chaves afirmó que la posibilidad de modificación está "abierta" y que no tenía "ningún miedo" a que en este debate se "enarbole el espantajo de que se debilita la unidad de España", un argumento que en referencia a Andalucía "es ridículo".

En la misma sesión, también emplazó al otoño la presentación de la ley de Fiscalidad Ecológica. El portavoz del grupo mixto, Ricardo Chamorro, se quejó del "sigilo" y "retraso" que, a su juicio, rodea al proyecto de ley, una demora que el presidente andaluz negó. Chaves calificó la ley como una de las "más importantes" de la legislatura y anunció que su aplicación sería gradual "para que no afecte a la productividad". La ley, dijo, recogerá tres tipos de impuestos (contaminación atmosférica, de las aguas litorales y residuos radiactivos y peligrosos).

La presidenta del Partido Popular, Teófila Martínez, preguntó a Manuel Chaves sobre la calidad de la prestación de los servicios públicos, una cuestión en la que el Gobierno andaluz "falla sistemáticamente" como demuestra, en su opinión, las quejas de los andaluces. "La Junta presta 1.500.000 servicios diarios y por cada 10 anomalías que ponga encima de la mesa yo le puedo poner millones de casos que se desarrollan con satisfacción", aseguró el socialista.

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Teófila Martínez, ayer, en la sesión de control del Parlamento.GARCÍA CORDERO

¡Pues anda que tú!

El pleno del Parlamento debatió ayer por tercera vez en lo que va de legislatura la idoneidad de que el nombramiento del director general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA) corra a cargo de la propia Cámara y no del Gobierno. Esta vez fue el PP quien planteó la iniciativa a raíz de una conferencia pronunciada por el presidente del Parlamento, Javier Torres Vela, días atrás en la que defendió la "desgubernamentalización" de los medios públicos de comunicación con medidas como la creación del Consejo Audiovisual y la elección del director general por las asambleas legislativas. La propuesta no sólo no es nueva, sino que forma parte del programa electoral del PSOE de 2000.

El debate de la iniciativa del PP, que no prosperó, derivó en un pugilato dialéctico entre José Luis Sanz (PP) y el socialista Manuel Pezzi (PSOE) del tipo "tú más" y "pues anda que tú", en el que ambos rivalizaron sobre qué televisión pública ocupa el primer puesto en el ránking de la manipulación. Para el popular, sin duda, Canal Sur; para el socialista, también sin vacilación, Televisión Española. Para la portavoz de IU, Concha Caballero, ambas.

El ejemplo que puso Sanz para avalar su afirmación fue la invasión de Irak a la que no llamó ni guerra sino "conflicto". "Para Canal Sur el criterio informativo no era el conflicto, sino el explicar los criterios del PSOE contra el Gobierno de la nación. Es imposible enterarse por la televisión pública andaluza de los argumentos del PP y del Ejecutivo y se si se hace es para ridiculizarlos. Se está dando una información propia de repúblicas bananeras".

Pezzi replicó que para "manifiesta manipulación" la de la TVE con el desastre del Prestige y la propia invasión de Irak, opinión que avaló con los escritos de "los trabajadores y periodistas de RTVE contra la censura y manipulación" en esa empresa.

El argumento del PSOE para oponerse a la iniciativa del PP es también conocido: está de acuerdo con que el nombramiento del director general se haga por el Parlamento y con la creación de consejos audiovisuales, pero no sólo para que rija para la de Andalucía sino en todas las televisiones públicas. Pezzi, que como coordinador del debate sobre el segunda modernización ha reconocido en alguna ocasión que la oferta de Canal Sur responde a "la primera modernización" de Andalucía, se extendió en elogios hacia el director general de RTVA, Rafael Camacho, frente a la afirmación de Sanz de que es el responsable de informativos "sectarios y bochornosos".

El debate entre ambos quedó en tablas, aunque eso sí Sanz aseguró que en 2004, año electoral, su partido planteará en el Congreso reformar el sistema de televisión pública. Mientras llega el momento, rechazó una enmienda del PSOE que planteaba que la elección "de todos" los máximos responsables de medios públicos sea haga a propuesta de las instituciones parlamentarias. El PSOE, aseguró Pezzi, volverá a prometer este objetivo en su próxima oferta electoral.

Concha Caballero subrayó los "reiterados incumplimientos" del Gobierno andaluz en comunicación "una materia que ha sido declarada reservada". Para la portavoz de IU, "manipula el PP y el PSOE". "La información no es a gusto de los políticos sino de la realidad y la realidad es que había muertos civiles en Irak y ustedes [los populares] los ocultaban. Existe, y mucha, manipulación en Canal Sur y utilización partidista, donde hay seguimientos incomprensibles de consejeros: igual que existe el programa Andalucía directo existe un Zarrías directo".