La fiscalía vasca se querella contra Otegi por menospreciar al Rey

La fiscalía del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) se ha querellado contra el portavoz de la ilegalizada Batasuna en el Parlamento vasco, Arnaldo Otegi, por unas declaraciones en las que calificó al Rey como "el jefe de los que han torturado a Torrealdai y Otamendi", en referencia a los detenidos en la clausura del diario Egunkaria, el único periódico que se editaba en euskera. Tras su puesta en libertad, Martxelo Otamendi, director del diario, denunció haber sufrido varios tipos de tortura.

En una rueda de prensa celebrada el 26 de febrero en San Sebastián aprovechando un viaje de los Reyes a Bilbao para inaugurar el proyecto energético Bahía de Vizcaya, Otegi calificó de "patética" y de "auténtica sinvergonzonería política" que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, acompañase al Rey en la ceremonia. "Estar hoy inaugurando un proyecto con el Rey de los españoles, que es el jefe supremo de las Fuerzas Armadas españolas y, por lo tanto, mando último de la Guardia Civil, es absolutamente lamentable", enfatizó Otegi durante su encuentro con los periodistas.

La fiscalía considera que estas expresiones albergan "un claro ánimo de menospreciar, de atentar al honor ajeno", en este caso al del Rey, ya que se emplean "términos impropios, excesivos, vejatorios y despreciativos". El texto de la querella apunta que la condición de parlamentario de Otegi no le exime de responsabilidad en el uso de ciertas expresiones. Las injurias contra el Rey están castigadas en el Código Penal con hasta dos años de cárcel.

Por otra parte, la Mesa del Parlamento vasco eludió en su reunión de ayer tratar de la disolución del grupo parlamentario que Batasuna mantiene bajo la denominación de Sozialista Abertzaleak (Patriotas Vascos). PNV, EA e IU, que forman el tripartito que sustenta al Gobierno autónomo, y el PSE coincidieron en que mientras el Parlamento no reciba una notificación oficial de la sentencia del Tribunal Supremo que ilegaliza a Batasuna no se debe debatir sobre esta cuestión.

Por el contrario, el PP reclamó la disolución y advirtió de que acudirá a todas las instancias posibles para lograrlo.