Chernienko, nuevo líder soviético, anuncia continuidad en la política exterior y cautela en la reformas internas

Constantin Chernienko, en su discurso ante el pleno del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética, que acababa de elegirle como secretario general del PCUS, puso ayer el énfasis en la continuidad de la política exterior de la UR SS y en la cautela en la realización de reformas internas, tímidamente iniciadas durante la corta etapa de su predecesor, Yuri Andropov. "No aspiramos a la superioridad militar, pero no permitiremos que se rompa el equilibrio conseguido", afirmó el nuevo dirigente del Kremlin. El Gobierno de EE UU reaccionó ayer de forma positiva al primer discurso de Chernienko, felicitándose por el hecho.de que se haya pronunciado "a favor de la resolución los conflictos internacionales mediante la negociación". La designación de Chernienko, de 72 años, considerado como delfín de Breznev y cabeza del ala burocrática de la dirección soviética, sitúa a dos ancianos en los puestos de mayor responsabilidad de las dos superpotencias en una etapa de incertidumbre. El presidente de EE UU, Ronald Reagan, tiene 73 años y aspira, con todos los pronósticos a su favor, a la reelección. Los funerales de Andropov se celebran hoy en la plaza Roja de Moscú.

Constantin Chernienko, estrecho colaborador del difunto Leonid Breznev, fue elegido ayer en Moscú nuevo secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), en sustitución de Yuri Andropov, cuyo cadáver será inhumado hoy en la plaza Roja. La idea de continuidad y cautela, tanto en política interior como exterior, ocupó un destacado lugar en el discurso que el nuevo secretario general realizó ante el pleno del Comité Central. "La continuidad", señaló, "no es una noción abstracta, sino una causa viva y real, cuya esencia procede, sobre todo, de moverse hacia adelante sin parar". La candidatura de Chernienko, que tiene 72 años de edad (tres más que Andropov y tres menos que Breznev en el momento de sus respectivas defunciones), fue propuesta por el jefe del Gobierno, Nikolai Tijonov, de 75 años, y contó con el apoyo unánime del Comité Central del PCUS, formado por algo más de 300 miembros. El triunfo de Chernienko supone la consolidación en la cumbre del ala más veterana del Politburó, seis de cuyos 12 miembros tienen 72 años o más. La elección de Chernienko fue anunciada en un boletín especial a las dos de la tarde (hora de Moscú). El presentador que leyó la noticia en la televisión, Igor Kirillov, es el mismo que anunció la muerte de Andropov, el pasado día 10, y la de Breznev, en noviembre de 1982. Aunque se habían barajado los nombres de otros candidatos al puesto de secretario general del PCUS, la idea de que Chernienko iba a ser el victorioso fue ganando fuerza desde que, se le nombró jefe de la comisión de duelo que debe presidir el funeral de Andropov. Procedente de una familia campesina siberiana, Chernienko había sido considerado en su día como el más probable sucesor de Breznev. El nombramiento de Andropov, sin embargo, hizo pensar que Chernienko había perdido su oportunidad. y que sus posiciones se estaban incluso debilitando en el interior del PCUS. Algunos análisis occidentales han dividido a la dirección soviética entre supuestos partidarios de Andropov y partidarios de Chernienko, atribuyéndoles a unos la característica de reformistas, y a otros, la de inmovilistas y partidarios de una continuidad que puede convertirse: en esclerosis. La división, con todo, no queda tan clara como se ha pretendido, ya que el mismo Chernienko fue quien propuso a And1ropov como nuevo presidente del Soviet Supremo, en junio de 1983. En aquella ocasión, Chernienko pronunció un discurso en apoyo de Andropov. En opinión de fuentes occidentales en Moscú, Chernienko, un hombre que enrojece con facilidad y que tiene cierta dificultad oratoria, ha sido, fiel al fallecido primer secretario, cuya memoria honró ayer ante el. pleno del Comité Central. Fuentes soviéticas consultadas por esta corresponsal no han expresado ningún tipo de emoción por la elección del nuevo secretario, al que vinculan con Breznev. Las mismas fuentes, sin embargo, habían expresado su pesar por la muerte de Andropov, a quien calificaban de "muy inteligente, mucho más iriteligente que Leonid Breznev". Lo cierto es que el ciudadano soviético sabe muy pocas cosas sobre la personalidad de sus dirigentes, ya que la vida privada de los mismos es mantenida en la más absoluta reserva. Ninguna fuente soviética consultada sabe, por ejemplo, si Chernienko está casado o no, si tiene hijos o no, y dónde vive. "Continuar y hacer avanzar por medio de los esfuerzos colectivos el trabajo comenzado bajo la dirección de Yurí Vladimirovich Andropov es la mejor manera de rendir tributo a su memoria, de asegurar la continuidad de su política", dijo Chernienko.