Al filo de la navaja

Frío polar, un campo arenoso y sin apenas hierba, un rival de poco pedigrí, cinco horas de avión, un engorroso tránsito por la aduana... Moscú mantiene sus señas de identidad, sigue siendo una estación nada apetitosa para el Real Madrid, que casi siempre se ha tomado la vía rusa como un marronazo: un suplicio para los suplentes y un descanso para los titulares. Pero esta vez, al contrario que la mayoría de sus siete visitas anteriores a la capital rusa, en las que jamás consiguió la victoria, el Madrid necesita envidar con todo. Para evitar sustos y bajar antes de lo previsto el telón de la décima, precisa una victoria hoy ante el Lokomotiv (TVE 1, 18.30). Si el Borussia Dortmund gana en Milán, donde el equipo de Carlo Ancelotti nada se juega, los madridistas sólo tendrán una plaza en cuartos de final si logran el triunfo. Eso sí, en caso de empate o derrota de los alemanes, al Madrid poco le importará su resultado en Rusia.

Por mucho que el Lokomotiv sea un rival de vuelo raso, la expedición española prevé un choque indigesto. "Preferiría jugármela con el Milan", sostenía ayer Raúl, consciente de que el Madrid se desenvuelve mejor ante enemigos con más galones y en escenarios más acogedores. "Lo de jugar en campos helados y con baloncitos naranjas...", deslizaba Helguera con cierta mueca de disgusto. El encuentro, fijado para las 20.30 hora local, se disputará a varios grados bajo cero -se preveía una fuerte nevada en la madrugada pasada-, aunque desde los medios rusos se apunte que no habrá hielo sobre el césped. Lo que sí hubo durante el entrenamiento de ayer fue fango, más fango que verde, lo que obligó a los jugadores a ensayar con tacos de goma en las botas. Era la única manera de no quedarse momificado sobre el barro. Dada la situación, hoy, antes del partido, los jugadores tendrán que calentar a conciencia, sobre todo Ronaldo, el más explosivo y con la musculatura más delicada.

Del Bosque, el técnico del Madrid, no quiere oír nada de nada acerca de la situación térmica, el color de la pelota y demás monsergas. A él le inquieta la escasa fiabilidad de los equipos rusos, "tan extraños que lo mismo les da ir primeros que últimos, su juego nunca depende de la clasificación".

El Lokomotiv es último del grupo, con un sólo punto, el que sumó en el Bernabéu en diciembre. Pese a dar la sorpresa y clasificarse en la primera ronda, en la que fue derrotado en Moscú por el Barça, se trata de un conjunto discreto, sin créditos. Además, el Lokomotiv apenas ha tenido otro ensayo que la Champions. La Liga rusa comenzó el pasado sábado, con victoria del rival del Madrid fuera de casa por 1-2 ante el Uralan Elista.

"No sé si estarán primados por los alemanes, pero me da igual; en Rusia, el público enloquece cuando llega el Madrid y los equipos hacen todo lo posible por ganarnos, esa es su prima", apuntó Helguera, que ha rescatado estos días de su retina un partido que jugó en Soria hace unas cuantas temporadas con el campo congelado. "Me costó bastante...; pero no valen excusas, el Bernabéu no estaba así y en la primera vuelta el Lokomotiv nos empató".

El central, que no jugó aquel partido, puede perderse también el de hoy. Aún tiene lastimado un tobillo: "Me duele y juego con molestias, porque estoy tocado; me cuidan a todas horas, pero va para tiempo", dijo por la mañana en el hotel de concentración. Por si fuera poco, por la tarde, en la última jugada del entrenamiento, el cántabro se resintió tras un balonazo de Raúl que estalló en su maltrecho tobillo. Sin Hierro, lesionado, y Roberto Carlos, sancionado, la baja de Helguera, que será examinado hoy por los doctores, agrietaría aún más la defensa madridista y daría paso a Rubén. La ausencia del lateral brasileño será remendada con Solari. A Del Bosque no le gustan los grandes desajustes. Por ello también, a pesar de la mirada al frente que necesitará el Madrid, Guti estará en el banquillo. Flavio y Makelele se mantendrán en la sala de máquinas. Si el asunto se atasca, Guti y Portillo -el milagrero de Dortmund- tendrán pista. Porque todo lo que no sea vencer al Lokomotiv dejará al campeón de Europa al filo de la navaja, con el rabillo del ojo fijado en San Siro.

Lokomotiv: Ovchinnikov; Lekgetho, Ignashevich, Nizhegordov, Pashinin, Evseev; Sirkhaev, Izmailov, Maminov; Loskov y Pimenov.

Real Madrid: Casillas; Michel Salgado, Helguera o Rubén, Pavón, Solari; Flavio, Makelele; Figo, Raúl, Zidane; y Ronaldo.