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Reportaje:

Arganda del Rey se convierte en objetivo electoral prioritario del PP

Los principales líderes del PP hacen campaña en este municipio de 36.000 habitantes, ante el asombro de la izquierda

Hace ya tiempo que empezó la precampaña electoral, pero en unos sitios más que en otros. Arganda del Rey es uno de ellos. En los últimos meses este municipio de 36.226 habitantes ha asistido al sorprendente desembarco de la artillería pesada del Partido Popular: José María Aznar, Ana Botella, Rodrigo Rato, Esperanza Aguirre y Ruiz-Gallardón se han dejado ver por la capital del sureste madrileño para apoyar la candidatura del popular Ginés López y recuperar así la alcaldía perdida en las pasadas elecciones, en manos ahora de una coalición de izquierdas (PSOE-IU).

El 27 de noviembre de 2002, los populares presentaron a su candidato en unos salones de bodas y bautizos en Arganda. Allí acudieron la esposa del presidente del Gobierno, Ana Botella, la candidata al Gobierno regional, Esperanza Aguirre, y el presidente del PP madrileño, Pío García Escudero. Junto a ellos, el núcleo duro del equipo de Ruiz-Gallardón. Meses más tarde, el propio José María Aznar asistió al famoso mitin de Arganda en el que un joven de 17 años fue expulsado por gritar "No a la guerra". El aspirante a la alcaldía, Ginés López, ha estado siempre bien arropado.

Pese a las inversiones multimillonarias, el PP perdió las elecciones de 1999

El más sorprendido por este desfile de primeros espadas es Pedro Díez, candidato del PSOE y actual alcalde: "A veces les pregunto a los del PP que qué he hecho yo para que utilicen todas sus armas". Él mismo se responde aludiendo al miedo y al histerismo que, según él, se ha sembrado en las filas del PP: "Tanta presencia de dirigentes es insólita en un pueblo con menos de 40.000 habitantes. Eso demuestra que se sienten desbordados porque saben que lo hemos hecho bien en esta legislatura y que los ciudadanos están con nosotros". Para Ginés López la razón es bien distinta: "Es una apuesta por el sureste. Lo que yo me preguntaría es por qué el PSOE de Arganda no cuenta con el mismo apoyo".

Arganda es un objetivo prioritario para ambos partidos. Su polígono industrial, con más de 1.500 empresas, las buenas comunicaciones desde la llegada del metro y su cercanía a la capital, tan sólo 27 kilómetros, hacen de sus 8.000 hectáreas de superficie una de las zonas de Madrid con mayores perspectivas de desarrollo. El caso de Arganda es similar al de Móstoles o San Sebastián de los Reyes, municipios de tradición izquierdista donde el voto está muy dividido. Salvo el periodo de cuatro años, entre 1995 y 1999, gobernado por el ahora aspirante Ginés López, Arganda ha estado siempre dirigida por un partido de izquierdas. Arrebatar la alcaldía a la coalición que gobierna podría suponer un efecto de llamada para otros municipios cercanos donde gobierna la izquierda.

El alcalde Pedro Díez apunta, además, a la historia reciente de Arganda como otra posible razón a tanto interés del PP por quitarle el poder: "Todo tiene mucho que ver con los comicios del 99. Desde entonces, Arganda es una piedra en el zapato del PP". Las pasadas elecciones fueron de infarto. Después de que en 1995 el PP consiguiera una victoria por mayoría absoluta, los populares se las prometían muy felices. No era para menos; el Gobierno regional se gastó 79 millones (13.156 millones de pesetas) en llevar el metro.

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Allí, el día de la inauguración medio pueblo se tiró a la calle para festejar la proeza y vitorear a los líderes del PP. Se aventuraba un triunfo seguro. Pero las inversiones no calaron en el electorado. Aunque el PP consiguió más votos, perdió la mayoría absoluta y tras un empate técnico con el PSOE a 10 concejales, el concejal de IU decidió la contienda aliándose con los socialistas. El tirón de Pedro Díez, que ya había gobernado en Arganda durante 12 años y la existencia de un voto ideológico que se escapaba a la gestión popular, fueron algunas de las teorías que se barajaron entonces. El aspirante a las elecciones del 25 de mayo, Ginés López, recuerda aquellos años y apunta a una posible relajación de su electorado: "Pudo haber un exceso de confianza. Ese día empezó a llover por la tarde y hubo mucha abstención que nos perjudicó".

Pedro Díez esgrime otra causa para tanto baile de dirigentes del PP. El socialista, que ya fue alcalde representando a IU entre 1979 y 1991, asegura que entre los populares "hay temor a que el éxito de la coalición PSOE-IU se extienda a otros municipios". El argumento sorprende a Ginés López: "Cómo pueden decir que mantienen un pacto modélico si ni siquiera se hablan". López se refiere a las rencillas existentes entre Díez y el único concejal de IU en el Ayuntamiento, Florián Moya. En enero de 2001 el pacto de la izquierda estuvo a punto de romperse después de que Moya votara en contra de la aprobación de los presupuestos municipales. Los presupuestos salieron adelante gracias al voto de calidad del regidor y a que una concejal del PP no acudió al pleno por estar de baja por maternidad, pero Díez llegó, incluso, a pedir la dimisión de Moya. Ambos sostienen hoy que el pacto sigue siendo firme y que ha sido un ejemplo para otros municipios.

Hasta el 25 de mayo los populares no verán si el apoyo de los dirigentes del partido se verá reflejado en las urnas. Si todo sigue como en las dos últimas elecciones, la de Arganda será una de las luchas más reñidas de la Comunidad y el ganador se hará con el control de un fortín que no es, ni mucho menos, inexpugnable. Ni para la derecha, ni para la izquierda.

Un hospital como bandera

Tanto López como Díez aseguran con un gesto impasible que, aunque no se tratan mucho, entre ellos hay una relación de cortesía. El rictus se les altera cuando se les recuerdan los temas más polémicos que rodean al municipio. Díez saca la bandera de la ecología y asegura que el PP trata de convertir la zona en un depósito de toda la contaminación de Madrid. Se enorgullece de haber frenado proyectos como la construcción de una central térmica y la implantación de una incineradora. "Lo cierto", según Ginés López, "es que eso nunca fueron proyectos de la Comunidad, sino simples ofrecimientos que se le hicieron a varios municipios de la comarca".

López pone sobre la mesa el tema de la ciudad deportiva Príncipe Felipe, el buque insignia del deporte argandeño. "Lo construimos nosotros, se opusieron entonces porque aquello les pareció una obra faraónica y un gasto de dinero, y ahora se enorgullecen cuando al Ayuntamiento le dan el Premio Nacional del Deporte 2002 por la gestión del deporte municipal".

La oferta de Esperanza Aguirre de construir un hospital comarcal en Arganda ha dado un giro a la precampaña electoral. El hospital que promete el PP tiene como principal objeto el de "ser un centro próximo, que sea capaz de resolver el 90% de los casos y que cuente con los medios más modernos". La respuesta del PSOE no se hizo esperar y Pedro Díez contraatacó ofreciendo 10.000 metros cuadrados para el hospital y para que "se inicien los trámites de la construcción antes de las elecciones".

El alcalde socialista insiste en que durante ocho años la Comunidad ha dado siempre un no por respuesta a la construcción de hospitales que resolvieran los problemas sanitarios de la zona.

La construcción del hospital fue uno de los temas en los que más incidió José María Aznar en el pasado mitin de Arganda. El acto contó, además, con la presencia de la ministra de Sanidad, Ana Pastor, otro peso pesado para apoyar al partido en el municipio.

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