El arte de seducir para conseguir trabajo

El mercado laboral está marcado por un exceso de prudencia. Cualquier decisión sobre posibles contrataciones se dilata al máximo, lo que lleva a quienes buscan empleo a una situación de incertidumbre, aseguran las fuentes consultadas.

Ante esta situación, lo que los expertos aconsejan es prepararse mucho, completando la formación académica. "El mercado es exigente y lo seguirá siendo; los requerimientos académicos no son del todo suficientes, no garantizan el éxito profesional; éstos, junto a los idiomas y el conocimiento informático, son la base de partida tan sólo. Los elementos que aportan realmente valor añadido a las personas en las organizaciones son, sobre todo, dos: la disponibilidad para viajar o cambiar de residencia y las capacidades o habilidades", explica David Albiach, director de salidas profesionales de la Escuela Superior de Gestión Comercial y Marketing (ESIC).

Para Belén Basteiro, directora de Recursos Humanos de Círculo de Progreso, "el mercado no está todo lo bien que sería deseable, pero, a la hora de ir a buscar empleo, mediante la entrega de currículum y a través de una entrevista personal, es muy importante hacerlo muy bien, sabiendo vender los méritos que uno tiene". Ambos son conferenciantes de Aula.

Albiach considera que "la selección para un empleo debe ser un arte de seducción mutua entre la empresa y el aspirante. Para alcanzar el éxito no sólo es importante conocer el perfil que piden, sino también saber qué nos pueden ofrecer".

La búsqueda de empleo se suele iniciar con la realización de un currículum. Basteiro enumera sus contenidos mínimos: localización, formación, un extracto de lo más interesante y adecuado para el puesto, no inflarlo con temas superfluos, indicar los idiomas, los conocimientos de informática, que "resulta fundamental", y la experiencia. En la entrevista de trabajo "hay que ser sincero" y "estar tranquilo". Esto, junto a "ser coherente, no fumar, ir bien arreglado sin llamar la atención, serían los básicos", dice Basteiro.

El perfil más buscado es un joven licenciado en gestión, administración, dirección de empresas o marketing, de entre 26 y 35 años, que hable perfectamente inglés, con conocimientos de ofimática y un master, dice Albiach. Ser responsable, con mentalidad empresarial y capacidad de trabajo y sentido ético, también cuentan.

Las personas con menos de cinco años de experiencia tienen más difícil encontrar trabajo desde hace dos años porque la demanda se centra en directivos. Para Albiach, "la cualificación del trabajador no sólo dependerá de la formación académica ni de su experiencia, sino que el profesional del futuro habrá de complementar y actualizar sus conocimientos para poder afrontar los retos y mejorar su valor dentro de la empresa y el mercado laboral".