Mínimos
El pesimismo de los inversores respecto de una solución pacífica en el conflicto de Estados Unidos con Irak alcanzó ayer cotas máximas, si se tiene en cuenta que sus decisiones llevaron a los índices bursátiles hasta nuevos mínimos anuales. Las perspectivas económicas a uno y otro lado del Atlántico también han dejado sentir su peso en los mercados de valores en los que la presión vendedora, aun siendo mínima, no consigue encontrar contrapartida.
El Ibex 35 cayó ayer el 1,73% para cerrar en 5.716,50 puntos, nuevo mínimo anual, y en la semana pierde el 4,72%. El índice general de la Bolsa de Madrid también acabó en mínimos tras perder el 1,56% en la sesión y el 3,90% en la semana.
El paso del tiempo en torno al conflicto con Irak tan sólo sirve de margen para que los preparativos bélicos alcancen un punto que los analistas empiezan a considerar de no retorno, a pesar de la oposición de numerosos países. El pesimismo vuelve a ser grande, sobre todo porque tiene un elemento acumulativo en los serios problemas de las economías occidentales para frenar su caída. La coincidencia en echar la culpa de esos problemas a la crisis con Irak cierra un círculo vicioso en el que las propias carencias que presenta la coyuntura no parecen encontrar cabida.
Los mercados europeos, con la excepción de Londres, también caían ayer a los niveles más bajos del año. París perdió el 2,26%, Londres el 1,79% y Francfort perdía el 0,11% antes del cierre. La Bolsa de Nueva York también llegó a la zona de mínimos anuales debido al incremento de la tasa de desempleo en el mes de febrero. El Dow Jones, sin embargo, se recuperaba ligeramente a media sesión.
La contratación en el Mercado Continuo ascendió hasta 1.430,06 millones de euros.
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