La princesa contra la reina

El pulso entre Margarita de Borbón Parma y su tía carnal, la reina Beatriz de Holanda, ha dejado de ser una riña familiar para convertirse en un asunto de Estado. La princesa llevaba quejándose varias semanas en la prensa de lo mal que ha tratado la casa de Orange a su esposo, Edwin de Roy van Zuydewijn, considerado un plebeyo poco fiable. La familia real callaba, pero en una entrevista concedida el martes por Margarita a la televisión holandesa, en la que acusó a la soberana de "abuso de poder", ha forzado la intervención del primer ministro, Jan Peter Balkenende. La princesa llegó a afirmar que su tía sabía que los holandeses preferían a su madre, la antigua reina Juliana, que a ella. También dijo que fue a verla para pedirle que pusiera fin a la situación, "y había gente escuchándonos en la habitación contigua". Según Margarita, una conversación que mantuvo en la sede de Asuntos Generales, dependiente del primer ministro, fue asimismo grabada. En un gesto sin precedentes en los Países Bajos, Balkenende ha encargado al abogado del Estado que investigue si las acusaciones de la princesa constituyen un delito. Lo que sorprendió luego es que reconociera que los servicios secretos y de seguridad habían investigado a De Roy. Una práctica normal, aseguró, aplicada a los nuevos consortes de la familia real. Para los verdes y los socialistas radicales se trata de un método excesivo que merece un debate parlamentario.-