Alperi levanta la suspensión a los comercios de magrebíes

El gobierno municipal de Alicante, con mayoría del PP, que preside Luis Díaz Alperi, ha decidido levantar la suspensión cautelar de licencias de apertura a establecimientos comerciales en las calles del centro de la ciudad donde la colonia magrebí ha implantado sus negocios. En una polémica decisión que no contó con el respaldo de varios técnicos municipales, el PP suspendió las licencias amparándose en la necesidad de "paralizar e invertir el proceso de deterioro que venía sufriendo la zona".

En una moción al pleno, el concejal de Comercio, Juan Zaragoza, argumenta ahora que ya "se ha conseguido detener el proceso de deterioro" y, puesto que la suspensión "afecta a los intereses particulares de los ciudadanos", procede levantar la suspensión cautelar.

La oposición advirtió de que la suspensión de licencias se acordó y se ha mantenido durante casi un año de forma irregular. Esquerra Unida incluso apreció tintes racistas en la medida. Sólo en caso de cambios en el planeamiento urbanístico pueden suspenderse legalmente las licencias, que son actos reglados. En este caso, las medidas que según Zaragoza han frenado el deterioro, han consistido en un lavado de cara de las calles (luces, adoquinado y aceras nuevas). También argumenta el concejal que durante el periodo de suspensión se ha redactado un plan para recuperar el centro tradicional de la ciudad.

Este plan tampoco ha estado al margen de la polémica. Uno de sus apartados incluye un censo peatonal por rasgos físicos. Alguien no indentificado en el documento municipal se apostó en una de las calles más transitadas por los inmigrantes para contar el número de personas que pasaban por ella. Esa información se elaboró según los siguientes rasgos físicos: magrebíes, hispanoamericanos, subsaharianos, europeos y españoles.

La portavoz de Esquerra Unida, Camino Remiro, ha tachado de "racista y xenófobo" tanto el documento como la suspensión de licencias.