El comité sanciona cautelarmente a Gurpegui "por indicios de dopaje"

El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), cuyos nuevos miembros ejercieron ayer por primera vez, dictó una providencia por la que suspende cautelarmente la licencia del jugador del Athletic, Carlos Gurpegui, por dar positivo por nandrosterona en un control antidopaje realizado en el primer encuentro de la presente Liga ante la Real Sociedad. Según el citado organismo, "los resultados emitidos por el laboratorio del control de dopaje del Consejo Superior de Deportes revelan que de la primera muestra se detecta una concentración media de 13,4 de sustancia nandrosterona, habiéndose procedido a la práctica del contraanálisis con un resultado de concentración media de 12,89 de la citada sustancia". El comité acordó suspender cautelarmente a Gurpegui porque "existen indicios racionales de que ha podido cometerse una infracción de dopaje, consistente en los resultados de los análisis, por lo que debe adoptarse una medida provisional con la finalidad de asegurar el cumplimiento de la sanción". El Comité de Competición, a la vista del expediente remitido por el presidente de la comisión antidopaje de la RFEF "ha tenido conocimiento y noticia de unos hechos que pueden ser constitutivos de una infracción de naturaleza muy grave, lo que induce a entender que el deportista está en una situación de sospecha de comisión de este tipo".

El comunicado del comité señaló que "el deportista no puede, por el bien de él mismo, del club al que pertenece, del fútbol español y del deporte en general, continuar participando en la competición deportiva, en tanto en cuanto no se aclare definitivamente la cuestión y se decida su exculpación o su sanción". El centrocampista vasco se podría enfrentar a una sanción que oscila entre la privación de la licencia federativa de tres meses a dos años y, en su caso, multa de 300 a 3.000 euros.

Sorpresa en el Athletic

La decisión del comité ha pillado por sorpresa al Athletic, que no esperaba una sanción cautelar ya que toda su batería jurídica de defensa se basa en el defecto de forma (el control se realizó tres meses después de ser tomada la muestra) y la sanción cautelar no ha sido habitual en el fútbol, ya que puede agravar la indefensión del deportista. "¿Cómo se resarciría al jugador de la suspensión padecida, en el caso de que al final la sentencia sea absolutoria para el futbolista?", afirmaban en el club bilbaino, antes de conocerse la decisión del comité.

El Athletic va a agotar todas las vías de recurso y apelación hasta las últimas consecuencias. El club rojiblanco puede interponer un recurso contra la suspensión cautelar ante el Comité de Apelación en el plazo de diez días.

Gurpegui ha sido el tercer jugador español que da positivo por nandrolona, tras los casos de Aguirretxu, en 1997, cuando militaba en el Celta, y de Guardiola, que la pasada temporada, cuando pertenecía al Roma, fue sancionado tras dos controles antidopaje en la Liga italiana.