El PSOE rechaza combatir en el Senado la reforma vasca
El PP había planificado una reforma legal de última hora en el proyecto de ley de protección de concejales para frenar cualquier modificación electoral en Euskadi que favorezca a los nacionalistas en Álava. Era su respuesta a la intención de PNV y EA de reformar la ley electoral vasca para atribuir escaños a la Diputación Foral de Álava, donde gobierna el PP con la aceptación del PSE.
La idea del PP era introducir una obligación por la que ninguna comunidad autónoma podía aplicar una reforma de su ley electoral hasta seis meses después de celebrados unos comicios. Con ese matiz, la propuesta para Álava quedaría desactivada.
El PP inició el miércoles contactos con el PSOE para pactar esa última incorporación a la ley de protección de concejales. Pero después de conocida la rectificación de los nacionalistas vascos, que han decidido aplazar la tramitación de su proposición de ley hasta después de las elecciones, los socialistas han renunciado a cualquier iniciativa en el Senado.
El PSOE no presentará ninguna enmienda en el Senado para frenar la reforma electoral a Juntas Generales en el País Vasco que defienden PNV y EA, según informaron a Europa Press fuentes de la dirección del Grupo Parlamentario Socialista.
"Dado que ya no existe esa urgencia no es necesario presentar ninguna enmienda, y se estudiará el tema con más tranquilidad, especialmente en sus aspectos constitucionales, para analizar las distintas variantes existentes en el caso de que PNV y EA vuelvan a plantear el asunto", indicaron.
Más plazo
PP y PSOE se han dado más plazo en el Senado para presentar enmiendas. Hasta el próximo miércoles tendrían posibilidad de incluir ese aspecto, para evitar que tuviera efectos sobre los votantes cualquier modificación legislativa sobre elecciones que emprendan los distintos parlamentos autonómicos en un periodo próximo a la celebración de unos comicios, como ha ocurrido en este caso.
Mientras el PP, a través de su presidente en Euskadi y ex ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, estaba convencido de que esta modificación legal era un buen sistema para combatir las intenciones de los nacionalistas, en las filas socialistas había muchas opiniones contrarias a avalar las tesis populares.
De hecho, el PSOE considera que combatir la iniciativa legal que planeaban los nacionalista vascos con la reforma legal para proteger a los concejales era una extravagancia semejante a la "cacicada" perpetrada por PNV y EA al intentar cambiar su norma a tres meses de las elecciones.
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