El sector conservador del Poder Judicial rompe el consenso y avala sin retoques la reforma penal
Los vocales progresistas insisten en que se cambie la ley para permitir reinsertar a terroristas
La mayoría conservadora del Consejo General del Poder Judicial impuso ayer finalmente su criterio en la reforma penal anunciada por el Gobierno. Por 12 votos a 9 logró el aval del pleno para informar favorablemente, sin retoques, el anteproyecto que establece el cumplimiento íntegro de las penas por terrorismo y otros delitos y eleva de 30 a 40 años la pena máxima de cárcel. El consenso alcanzado la semana pasada quedó roto con una enmienda del bloque mayoritario. El retoque evita suprimir una párrafo de la reforma que no diferencia, a efectos de posibles beneficios penitenciarios, entre terroristas condenados a numerosos años pero con un pronóstico de reinserción y los que carecen de este pronóstico.
Aguiar razonó el argumento de la minoría de que "a los condenados con arreglo a una legislación anterior no puede aplicárseles una nueva legislación desfavorable y que afecta al derecho fundamental a la libertad".
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