El matiz bien temperado
Tan inevitable como el encuentro de un paraguas con una máquina de escribir sobre una mesa de disección, en metáfora muy antigua, como todo lo suyo, de Tomás Breton acerca de la significación surrealista, era el encuentro de un histrión de altura como Rafael Álvarez El Brujo con alguno de los monólogos que el premio Nobel Dario Fo confeccionó a su mayor gloria escénica, de tan larga trayectoria. Le ha tocado el turno a esta historieta, que oscila entre la ironía, lo sarcástico y la irreverencia, y una cierta dulzura seráfica, acerca de un santo, Francisco de Asís, juglar de Dios a la italiana que tendría en nuestro Sant Antoni dels Porquets su correspondencia más próxima, en lo que tiene que ver con la significación más a mano.
San Francisco, Juglar de Dios
De Dario Fo, en Versión y traducción de Carla Matteini. Escenografía, Dario Fo. Interpretación y dirección, Rafael Álvarez El Brujo. Teatro Olympia. Valencia.
Más que eso, y sus consecuencias y sus orígenes, importa el encuentro de dos personajes dotados de gran talento escénico. De Dario Fo nada hay que añadir, porque todo el mundo lo conoce y porque todos tienen noticia de esa fecunda dedicación a la ironía teatral que le llevó a alcanzar el Nobel de Literatura (Boadella estuvo en prisión, y quizás carece de ese enorme galardón porque lo suyo no es precisamente la escritura, como tiene bien demostrado, sino la invención escénica). Rafael Álvarez es otra cosa, tan distinta como verdadera. Desde su primer papel de éxito como borrachín de navaja y tente tieso en La taberna fantástica, un texto del Alfonso Sastre anterior a las dudosas alegrías de Hondarribia, El Brujo se decidió por la picaresca en solitario, lo que le llevó a formar compañía propia centrada en los milagros de la picaresca. Y ahí sigue, con sus enormes registros de voz y la infinitud de sus matices corporales, al servicio de un texto de un catolicismo ya extraño para los católicos de oficio, donde brilla como actor de mucha garantía para jolgorio de un público también adolescente.
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