Un inmigrante sin papeles muerto y dos heridos al arrollar un tren su coche cuando iban a trabajar
Los marroquíes se dirigían a una explotación agrícola en San Isidro, en la Vega Baja
Como cada mañana, un grupo de braceros marroquíes sin papeles recorría en su utilitario las explotaciones agrícolas de la Vega Baja en busca de trabajo. Ayer, su azaroso deambular por los campos se vio truncado: un tren de cercanías arrolló el coche en el que viajaban los inmigrantes al cruzar un paso a nivel sin barrera en el término de San Isidro, a escasos metros de un campo de brócolis donde iban a pedir faena. El accidente causó la muerte a L. H., de 30 años. Su compañero, P. H., de 32 años, resultó herido muy grave y el tercer bracero, D. S., de 34, quedó malherido.
Los tres inmigrantes, originarios de la ciudad marroquí de Benimalad, no tenían regularizada su estancia, según fuentes de la investigación. Los heridos están ingresados en los hospitales de Elche y Orihuela.
El siniestro se originó al filo de las 7.50 horas cuando un tren de cercanías arrolló el vehículo de los inmigrantes, un turismo Renault Clio matriculado en Italia, que cruzaba un paso a nivel sin barrera, en el kilometro 36 de la línea Alicante-Murcia. El convoy arrastró al coche unos cien metros. El tren perdió estabilidad y el vagón de cabeza descarriló. En sus vagones viajaban 55 personas que resultaron ilesas.
Uno de los compañeros de trabajo de los marroquíes siniestrados, Oualijane Lhoylent, comentó que a esa hora de la mañana había mucha niebla en la zona, lo que pudo impedir ver la llegada del tren. El equipo de atestados todavía no dispone de ninguna hipótesis sobre las causas del accidente. El vaho del interior del vehículo pudo restar visibilidad en el paso a nivel, preceptivamente señalizado y ubicado en una gran recta con buena perspectiva de la vía.
El compañero de las víctimas insistió en que los tres disponían de permiso de residencia y trabajaban legalmente. Sin embargo, los agentes de la Guardia Civil que inspeccionaron el amasijo de hierros al que quedó reducido el coche no hallaron ningún tipo de documento.
A pocos metros del lugar del accidente se encuentra la explotación agrícola, dedicada esta temporada al cultivo de brócoli, propiedad de la empresa Hortocox, SL. A una decena de metros se encuentra una chabola construida con ladrillos y tapada con uralita. En la puerta, seis ciudadanos marroquíes, aguardaban a los periodistas. Todos asientieron cuando se les preguntó si conocían a los accidentados y si trabajaban en el campo cercano.
Sus compatriotas, comentaron, venían cada mañana desde Elche en su coche, en busca de trabajo. Hacía unos 15 días que no acudían a esta zona. En San Isidro reside el hermano de uno de los marroquíes que sufrieron el accidente.
Un representante de la empresa aseguró que todos sus trabajadores están dados de alta en la Seguridad Social, y que en esa empresa no se contrata a nadie sin documentación. "Tal vez venían a preguntar si había trabajo", dijo un trabajador.
Renfe, por su lado, destacó que el paso a nivel donde se registró el accidente está debidamente señalizado. Sin embargo, el Ayuntamiento de San Isidro de Albatera denunció la peligrosidad del cruce. José Andrada, teniente alcalde, del PSPV, aseguró que en los últimos 10 años se han producido tres accidentes mortales. El de ayer afectó a 2.000 pasajeros y 23 trenes. La línea férrea se restableció a las 17.20 horas.
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