Caiga quien caiga (CQC)
La derecha en este país es la que siempre lleva peor la crítica política; ni los guiñoles de Canal + ni el CQC. Hablar de los asuntos sociales de Ana Botella ha sido la gota que ha colmado el vaso para quitar un programa de notable audiencia y brillante como pocos en este país. No le renuevan el contrato: ¡¡sus peores noticias!! pim, pam, pum... pis, pas, que te vas... dicen en las páginas del Crónica de una muerte anunciada, hasta diciembre.
En el fondo, qué se puede esperar de un Gobierno que, ante la incompetencia del Prestige y la falta de recursos propios, no soporta la crítica política.
Qué se puede esperar, pues, del panorama en televisión. Penoso país, penosa despedida y penosa libertad de expresión. Al nuevo telespectador unamuniano de esta España nuestra le informan que "viva lo rosa embotellado, muera el ingenio y la inteligencia". Hasta pronto y gracias, CQC, ¡maestro Reverendo! Más de lo mismo... en la caja tonta, y el tú más... en la política de un Gobierno.-
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