La dimisión del director abre una crisis en Alicante Acoge

El director técnico de la organización humanitaria Alicante Acoge, Carlos Gómez, presentó ayer su dimisión irrevocable ante el patronato de la entidad "por la falta de apoyo y respeto hacia su labor". En un comunicado emitido por Gómez, el ya ex dirigente explica su cese por la "continua dejadez y falta de respeto personal y profesional" por parte del presidente de la organización, Miguel Romá.

La renuncia de Gómez, sociólogo, profesor de la Universidad de Alicante y autor de numerosos trabajos sobre la situación de los inmigrantes en la provincia de Alicante y de la Comunidad Valenciana, propició, a su vez, la dimisión la semana pasada del presidente y del vicepresidente, a petición de un grupo de patronos de la Fundación. A raíz de hacerse oficial la dimisión de Carlos Gómez, el obispado, a través de Cáritas y el Secretariado Diocesano de Migraciones, y el vicepresidente de la entidad se vieron obligados a presentar también su renuncia con el propósito de desbloquear la situación, según explica el hasta ahora director técnico.

Esta cascada de dimisiones ha abierto una profunda crisis en el seno de una de las organizaciones más destacadas por su labor con los colectivos más desfavorecidos de la capital, principalmente inmigrantes y el colectivo gitano. Un grupo de trabajadores de la entidad humanitaria, según Gómez, dirigieron un escrito a la Fundación en el que responsabilizaban al presidente y al patronato de "la dejadez que han venido mostrando en los últimos años". Los empleados los acusan también de la marcha del director.

División

Carlos Gómez denuncia, en su escrito, que "la profunda división" que vive el seno del patronato de la Fundación hace "imposible" mantener un trabajo que necesita, a su entender, del máximo apoyo dentro de la organización. Esta situación "hace que no se den las circunstancias necesarias para continuar en Alicante Acoge", afirma.

"No es posible, por más tiempo, continuar dirigiendo una organización en la que el presidente y algunos patronos han evidenciado estos años su falta de respeto, comprensión y apoyo al trabajo que desde la dirección técnica se ha venido haciendo". "Esta situación", continúa el comunicado, "ha ido agotando y mermando la posibilidad de desarrollar un trabajo digno, coherente y justo a favor de los inmigrantes".

Fuentes del obispado lamentaron ayer la dimisión de Carlos Gómez, a quien atribuyen una labor "encomiable" dentro de la organización. A su juicio, Gómez logró no sólo levantar esta entidad humanitaria sino convertirla en todo un referente de cómo se ha de abordar la problemática social. "Alicante Acoge es hoy una institución modélica gracias a Carlos", añadieron. Esta situación provocará, en su opinión, una reforma, dentro de la Fundación pero a un precio muy elevado, declararon fuentes del obispado.