Suiza tendrá el museo Charles Chaplin
La guerra fría y la fiebre anticomunista que se desencadenó en Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial tuvieron la culpa. El 6 de enero de 1953, Charlie Chaplin, al que el macartismo había obligado a irse de Estados Unidos, llegaba con su familia a la finca de Ban, en Corsier (cantón de Vaud, oeste de Suiza), donde, según sus conocidos, vivió feliz los últimos 25 años de su vida. Esta mansión, construida en 1830, rodeada de un parque de 13 hectáreas con árboles centenarios y desde la cual pueden verse el lago Lemán y los Alpes franceses, albergará el Museo Chaplin, que se abrirá en el año 2005. Michael Chaplin, uno de los ocho hijos del cineasta, tuvo la idea tras atender a gente del mundo entero que llamaba al portón y pedía permiso para visitar la casa de Charlot. "Ésta es su casa, es aquí donde vivió los últimos años de su vida y donde fue feliz. Además ya nos hemos puesto de acuerdo toda la familia", afirma. La concepción del futuro museo fue encargada al canadiense Yves Durand, autor de el Visionárium de Europarque, el más importante museo de ciencias de Portugal. Durand, gran admirador de Chaplin, al que llama "el noble vagabundo", propone un encuentro entre el hombre, el artista y el humanista, pero también con la época en la que se desarrolló su obra. En los sótanos abovedados se recreará el ambiente de los pequeños cines de barrio, como el Nickel-Odeón, en los que se proyectaban las primeras películas mudas y los que olían a las naranjas que se repartían y el de los graneros en los que las pantallas eran sábanas blancas. Pero Durand desea evocar también la vida familiar de Charlot y el recuerdo de Louis Aragón, Jean Cocteau, Picasso y otros artistas e intelectuales progresistas que influyeron en Chaplin, así como el de la era hollywoodiense que brilló con sus éxitos y los de Buster Keaton y los Hermanos Marx.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.