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Reportaje:

Cuestión de amor propio

La atención a las estrellas madridistas ha irritado al Barça, según Van Gaal

¿Será otra vez Puyol quien sujete a Figo? ¿Quién frenará entonces a Ronaldo? ¿Y Raúl? ¿No es él quien siempre pilla un rechace? ¿Cómo se multiplicará una zaga tan mermada? Nunca la balanza se había decantado tanto hacia un lado. El Barça ha pasado en este clásico a ser un sujeto pasivo, en negativo. Su objetivo lo ha puesto en cómo frenar a los cinco magníficos, que, en realidad, serán cuatro porque Zidane no jugará. Los azulgrana, siempre protagonistas, se han visto relegados a un segundo plano. Nadie ha parecido obsesionado en cómo detener a Kluivert, Saviola o Riquelme. "Sí, esas comparaciones me han irritado mucho", dijo Van Gaal; "y a los jugadores, también".

Fue ése el único comentario que hizo Van Gaal para elevar el tono de un clásico de guante blanco y para reforzar la autoestima de una plantilla, que, salvo jugadores como Puyol o Luis Enrique, tiene fama de blanda. El entrenador escribió anteayer en su pizarra tres ideas claves que, para su enojo, acabaron ayer publicadas: "Controlar las emociones, ser listos y tener rabia". "Es un arte", precisó ayer, "equilibrar la rabia con la emoción. Y hay otra cosa más, que he dicho mil veces en el vestuario: la orientación, que es buscar más los espacios que preocuparse del rival".

Van Gaal no quiso hurgar en la herida que dejó Figo -"yo estuve en el campo cuando vino por primera vez y no fue agradable, pero jugamos contra todo el Madrid, no sólo contra Figo"- ni tampoco replicó a Ronaldo, que desistió de hacer un swing si marca un gol. "Los jugadores", dijo, "siempre provocan más que los técnicos. Cuestión de edad. Pero supongo que Abelardo o Jordi Cruyff también vinieron muy motivados y perdieron ".

Vicente del Bosque, el técnico del Madrid, instó a su equipo a ignorar el ambiente del Camp Nou: "No me preocupa en absoluto. Lo único que hay que hacer es estar muy pendientes de que no nos distraiga". Prudente, agregó que teme que los internacionales acusen el cansancio -Guti sufrió un golpe en el ensayo- y se negó a juzgar la trayectoria del Barça: "No estarán ni Luis Enrique, lesionado, ni Rivaldo, pero lo veo muy en la línea de las últimas temporadas. Está muy bien en Europa y muy irregular en la Liga. Pero es el equipo más goleador en casa ".

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