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PSOE e IU abogan por recuperar un solar cedido por el alcalde a una fundación religiosa

Los vecinos de San Blas se oponen a que Comunión y Liberación levante allí un colegio

Los vecinos de San Blas se pusieron ayer de nuevo en pie de guerra para protestar contra el estado de deterioro en el que se encuentran los centros públicos de su distrito y para reclamar, una vez más, que no se permita la construcción de un colegio concertado en una parcela de 20.000 metros cuadrados que el Ayuntamiento regaló en febrero pasado a una fundación religiosa conservadora. Los vecinos estuvieron arropados en su protesta por las candidatas a la alcaldía de Madrid - Inés Sabanés (IU) y Trinidad Jiménez (PSOE)-, así como por los sindicatos.

La protesta protagonizada ayer por varias decenas de vecinos y alumnos de los centros públicos de San Blas tiene un motivo claro que se resume en una sola cifra: 12 millones de euros. Esto es lo que cuesta la parcela que el Ayuntamiento de Madrid cedió de forma gratuita en febrero pasado -por un periodo de 75 años- a la fundación religiosa conservadora Comunión y Liberación para que levantara en ella un centro concertadoe (privado, pero financiado con fondos públicos). Y esa misma cantidad es la que la Junta de Centros de San Blas reclama a la Consejería de Educación para poder adecentar los 22 centros públicos del distrito.

La Junta de Centros, en la que están representados 16 colegios e institutos públicos, así como asociaciones vecinales y de padres de alumnos, elaboró en junio pasado un informe en el que revelaba el estado "lamentable" de algunos centros con más de 20 años de antigüedad, así como la clara descompensación en la distribución del alumnado inmigrante y con necesidades especiales en los colegios: el 84% de ellos cursa estudios en centros públicos. Los propios datos de la Consejería de Educación de finales de 1999 revelaban que de los 138 alumnos de etnia gitana escolarizados en San Blas, sólo uno estudiaba en un centro concertado. Según los datos de este curso, los centros concertados tenían como media a un 2,5% de alumnos con necesidades especiales, frente al 15% de los colegios públicos.

"Estado de abandono"

Este informe, que traduce en cifras la sensación de padres, profesores y alumnos de que las escuelas públicas de su distrito están en estado de "abandono", según el padre de un alumno, es el motivo por el que se oponen a la construcción de otro centro concertado, que estaría situado en el barrio de Las Rosas, donde se están haciendo 10.650 viviendas.

Trinidad Jiménez e Inés Sabanés, candidatas ambas a la alcaldía madrileña por el PSOE y por IU, respectivamente, coincidieron en señalar que, de llegar al primer sillón del Consistorio, intentarían recuperar la parcela y anular la cesión gratuita a Comunión y Liberación. "Pero sabemos que es difícil", señaló ayer Sabanés. "Si quisiéramos anular la cesión, el único motivo posible sería que la fundación no cumpliera los objetivos para los que le fue cedida, por ejemplo, no construir el colegio". La otra solución posible, según Sabanés, sería la de ceder otra parcela a la organización religiosa y recuperar la primera para un uso público. "San Blas tiene mucha necesidad de equipamientos públicos y no se puede ir regalando parcelas por ahí, y menos para un uso privado", añadió Sabanés.

Ambas candidatas, que ayer acudieron a apoyar a la Junta de Centros y a los vecinos de San Blas en su concentración frente a la parcela de la discordia, estuvieron acompañadas por parlamentarios regionales de sus partidos como Franco González, de IU, y Adolfo Navarro, del PSOE; por representantes de los sindicatos como Francisco García, de CC OO, y José Mata, de UGT. y por representantes de Asociaciones de Padres de Alumnos (APA) como la FAPA Giner de los Ríos.

Una representante del APA de San Blas pidió para su distrito un plan para devolver el prestigio a la escuela pública, rentabilizar las aulas vacías existentes, "cosa que haría innecesaria la construcción del centro de Las Rosas", y un plan general para resolver los problemas de los centros guetos en los que se concetran una mayoría de alumnos problemáticos. Mata, por su parte, acusó a Educación de "intentar vaciar las escuelas públicas de San Blas con su falta de interés hacia ella".

Trinidad Jiménez recordó que el Gobierno regional ha dejado este año de ejecutar 70 millones de euros de su presupuesto que, según ella, "deberían haberse destinado a la educación". Sabanés, por su parte, reclamó una "sobreinversión" en la educación pública, que cifró en 30 millones de euros, y reclamó "una discriminación positiva" para la escuela pública en los planes de gasto del Gobierno regional.

Durante la concentración, los participantes hicieron también alusión con sus pancartas a los barracones instalados en un centro público de San Blas, el Alberto Alcocer, contra los cuales se manifestaron el mes pasado 600 personas. En referencia a estos módulos, en los que estudian este año 1.400 alumnos en la región, Jiménez tildó el fenómeno de "intolerable e increíble".

MIGUEL GENER

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