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Olivas exigió al Grupo Popular ser incluido en la ley de ex presidentes

La dignidad de presidente tiene precio, según Esquerra Unida

El acuerdo entre populares y socialistas para modificar la Ley de Estatuto de los Ex Presidentes de la Generalitat se rompió porque el actual titular del Consell, José Luis Olivas, exigió al Grupo Popular de las Cortes Valencianas ser incluido entre los beneficiarios de una normativa que ambos partidos se habían comprometido a rebajar después de las críticas que recibieron.

Olivas exigió a su partido que su situación se recogiese en la ley de ex presidentes de la Generalitat, según fuentes conocedoras de la negociación PP-PSPV. Populares y socialistas acordaron en julio limitar los beneficios de la misma a quienes hubiesen ostentado el cargo como mínimo durante una legislatura, situación que dejaba fuera al actual titular del Consell. Fuentes del PP reconocieron ayer que el vicepresidente José Joaquín Ripoll asumió las riendas de la negociación con los socialistas para intentar contentar al actual inquilino del Palau de la Generalitat y buscar un acuerdo entre partidos que no pusiese a los pies de los caballos al portavoz del Grupo Popular, Alejandro Font de Mora, que ya había comprometido su palabra en el pleno de las Cortes sobre el contenido de la modificación pactada con el Grupo Socialista.

Fuentes del PSPV explicaron que la negociación sobre la enmienda a la ley de ex presidentes pactada en julio se abrió a instancias de Presidencia de la Generalitat con la pretensión de que se reconociese la futura situación de Olivas como ex jefe del Consell. Estas fuentes indicaron que el PP insistió en la inclusión de Olivas, pero sin recortar los beneficios ya pactados en la enmienda para los otros dos beneficiarios, Eduardo Zaplana y Joan Lerma.

El portavoz socialista, Joaquim Puig, señaló ayer, tras recordar las palabras de Font de Mora en el pleno que aprobó la ley, que es 'indignante' que los populares hayan roto el acuerdo. 'Había un compromiso para rebajar por arriba y por abajo' las prerrogativas que la ley otorga a los ex presidentes de la Generalitat, dijo Puig, quien añadió que si los acuerdos institucionales que los socialistas consensúan con el PP se rompen de forma unilateral por parte del partido del Gobierno, como en este caso, 'no serán respetados en el futuro por un Gobierno progresista'.

Mientras, los otros dos grupos de la oposición criticaron duramente la decisión. 'Olivas ha demostrado que la dignidad de un presidente de la Generalitat tiene un precio', declaró el portavoz adjunto de Esquerra Unida, Joan Antoni Oltra, que criticó tanto a los populares, que han 'mostrado su verdadera cara, evidenciando que en cuestión de dinero no tienen límite', como a los socialistas, por dejarse 'engañar' por aquellos al pactar 'una cuestión tan fea y tan vergonzosa como ésta'. Joan Francesc Peris, del Grupo Mixto, tachó de 'bochorno político' la decisión del PP. Para Peris, la posibilidad de que Olivas se beneficie del estatuto de ex presidente después de estar sólo 11 meses al frente de la Generalitat es 'una burla a todos los trabajadores valencianos, también a los trabajadores políticos'.

La cuestión será objeto de debate durante la tramitación parlamentaria de la Ley de Acompañamiento. Los socialistas se declararon 'abiertos' a negociar la enmienda que han presentado. El principal grupo de la oposición ha presentado un total de 82 enmiendas al texto. Además de plantear la supresión de todos sus capítulos, el PSPV incide en la necesidad de refundir las leyes de Hacienda Pública, de Tasas y del tramo autonómico del IRPF. También reclaman la creación de una consejería de Universidades, I+D+I y Conocimiento.

Por otra parte, el PP rechazó ayer las enmiendas al proyecto de ley de Espectáculos. La Federación de Hostelería (FEHVP) criticó la decisión de los populares, que no han recogido sus sugerencias y necesidades, y anunció la posibilidad de presentar un recurso de inconstitucionalidad.

Mínimo y máximo

Olivas y el PP han dejado en mal lugar a su portavoz en las Cortes, Alejandro Font de Mora, que se ha visto obligado a presentar una enmienda a la ley de los ex presidentes que contradice lo que dijo en el pleno en julio. Tras las críticas que había recibido la ley, socialistas y populares acordaron cambiarla. El portavoz popular dijo en el pleno que era necesario 'atajar' la 'confusión' creada por el texto original y precisó que se se iba a atajar 'acotando dos límites temporales: un límite mínimo de una legislatura como presidentes de la Generalitat para poder acceder a lo dispuesto en la ley, y un límite máximo de permanencia en el CJC'.

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