El Gobierno no precisa la fecha de aprobación definitiva del trasvase del Ebro

El trasvase del Ebro, obra principal del Plan Hidrológico Nacional (PHN), avanza a paso lento. El Gobierno no ha licitado todavía la redacción del informe de impacto ambiental del trasvase del Ebro a las cuencas de Cataluña ni tampoco a las del Júcar, el Segura y la cuenca del Sur, según ha reconocido el Ministerio de la Presidencia a la senadora socialista María Antonia Martínez. La senadora ha preguntado al Gobierno la fecha prevista para la aprobación definitiva del trazado del trasvase del Ebro.

La ley del Plan Hidrológico Nacional (PHN), aprobada en octubre del año pasado, exige una declaración de impacto ambiental de todos los tramos parciales de la conducción. Según la Presidencia del Gobierno, 'está en curso de licitación la contratación de la asistencia técnica para elaborar los estudios ambientales necesarios para la posterior redacción del estudio de impacto'.

La Presidencia reconoce a la senadora socialista que no le es 'posible en este momento precisar una fecha de aprobación definitiva del trasvase', ya que el trazado final no se definirá hasta que se emita la declaración de impacto ambiental.

El Ejecutivo de José María Aznar reconoce, por otro lado, a la senadora socialista el carácter excedentario de ríos como el Duero, que en el periodo 2000/2001 disponía de un sobrante neto de 18.466 hectómetros cúbicos por año, lo que abonaría las tesis de los socialistas, que defienden el trasvase de agua a la Comunidad Valenciana pero no a costa exclusivamente del río Ebro. El desvío de caudales procedentes del Duero ya lo defendió en su día el entonces ministro socialista de Obras Públicas y Medio Ambiente Josep Borrell como una alternativa. El trasvase proyectado desde el Ebro suministrará unos 1.000 hectómetros cúbicos.

Relacionado también con el PHN, el grupo Acció Ecologista Agró cuestionó ayer el cumplimiento por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar de 'los supuestos básicos' del PHN, ya que hasta octubre de este año la Confederación ha resuelto favorablemente la concesión de aguas subterráneas para regadío en la provincia de Valencia por un volumen de más de 9 hectómetros cúbicos.