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'Hay cosas de 'La Demencia' que no me han gustado nada'

Lo dijo Moncho López, nuevo seleccionador nacional: 'Felipe Reyes marcará este año diferencias'. Y a fe que se ha cumplido. Contra el Caprabo, Reyes (Córdoba, 1980) sumó su séptimo partido consecutivo logrando dobles figuras. A pesar de sus números, 15 puntos y 12,5 rebotes por encuentro, mantiene su carácter risueño, sólo alterado cuando se le habla de La Demencia, la hinchada del Estudiantes, que le acusa de llevar el escudo del Madrid tatuado en los tobillos.

P. ¿Cómo se explica su mejoría de un año para otro?

R. Sigo siendo el mismo jugador, pero tengo más minutos.

P. ¿Cuál es su secreto para capturar tantos rebotes?

R. Que no doy ninguno por perdido y que busco el sitio oportuno. Es echarle muchas ganas.

P. ¿Bajo los tableros se impone la ley de la selva?

R. Cuando te toca un jugador un poco leñador y te suelta un codazo, le dices que qué pasa. Pero a veces es peor; le picas y va más a por ti.

P. Sus mejores cifras han coincidido con la marcha de su hermano al Madrid. ¿Le ha supuesto una liberación?

R. No, para nada. Cuando estaba mi hermano, yo no jugaba tanto. Pero si hubiera seguido aquí, yo habría jugado lo mismo. Y nos complementamos. Me fastidió mucho su marcha. Era un jugador muy importante para Estudiantes. No se debió dejarle escapar así. Era clave dentro del equipo. Pero ha sido lo mejor para él y su familia: está en Madrid y en un grande.

P. Sí, y además, en el enemigo patológico de Estudiantes.

R. Da igual, lo prefiero a que se hubiera ido a otra ciudad.

P. Moncho López , el nuevo seleccionador, dice que usted va a marcar las diferencias este año.

R. ¿Quién, yo? Se lo agradezco y espero no defraudarle. Ya me ayudó mucho este verano en la selección. No me sentía muy importante y él me dio ánimos.

P. Imbroda admitió que Estudiantes es el primer equipo de Madrid. ¿Coincide?

R. Ahora mismo, sí. Hemos ganado el trofeo de la Comunidad y ganamos al Madrid el otro día.

P. ¿La demencia es un fenómeno social?

R. De La demencia no quiero hablar.

P. ¿Por qué?

R. Les respeto, pero ya está. Siempre hablé muy bien de ellos, pero a partir de ahora no quiero hablar.

P. ¿Por cómo asumió la marcha de su hermano Alfonso?

R. No. Han pasado ciertas cosas que no me han gustado nada. Pero prefiero no decir nada que luego me pueda perjudicar.

P. ¿Por la sospecha que ha despertado su manía de jugar con las medias hasta la rodilla?

R. Dicen que tengo un tatuaje del Madrid en los tobillos. Y como ve [los muestra] no tengo ninguno. Como puede observar, es mentira. Lo que ocurre es que el año pasado, tras un bache del equipo, me puse los calcetines hasta arriba por cambiar de imagen y buscarme suerte. Y me salió.

P. Hombre, lo cierto es que usted estuvo a punto de irse al Madrid. Y eso cuesta perdonarlo.

R. Puede que sea por eso. Pero que no quiero hablar de La Demencia.

P. ¿Piensa en la NBA?

R. De momento, no. Pienso en hacerlo bien en Estudiantes, y luego, ya veremos. No he hecho nada aún.

P. ¿Siente envidia de Gasol?

R. No. Es un grandísimo amigo mío, y me alegro por él. A nosotros nos viene bien, porque nos está abriendo las puertas.

P. ¿Por qué Estudiantes no para de sacar jugadores de la cantera y el Madrid no saca a nadie?

R. Porque, al llegar al primer equipo, los entrenadores de Estudiantes confían más en los de la casa que en los de otros equipos. Y en el Madrid, se confía más en los de fuera que en los de casa.

P. ¿Cuál es el pívot más difícil de defender?

R. Mi hermano. Es muy fuerte y es muy difícil. A mí me es más comodo defender a los pívots rápidos.

P. ¿Y el más complicado de superar?

R. Ninguno en concreto. Quizás, Dueñas, por ser tan alto. Cuando m enfrento a él me cuesta mucho coger rebotes.

P. ¿En qué jugador se fijaba cuando era pequeño?

R. En mi hermano. Y de la NBA, en Dennis Rodman.

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