Zapatero: 'Quienes vengan con nosotros saben que tienen que venir a servir y no a servirse'

José Luis Rodríguez Zapatero expresó de forma gráfica ayer su idea de la regeneración democrática que quiere para su Gobierno: 'Quienes vengan con nosotros saben que tienen que venir a servir y no a servirse', proclamó en un acto en Salamanca. Además, Zapatero no tendrá ministros que dejen sus departamentos de repente para aspirar a la presidencia de una comunidad autónoma. Tampoco lo podrán hacer los presidentes del Congreso y del Senado. Todos ellos, prometió el líder del PSOE, tendrán férreas incompatibilidades que impedirán esos saltos políticos habituales en el PP.

Promete que sus ministros no dejarán de repente el cargo para ser candidatos

'Varias generaciones de jóvenes serán las de menos futuro en 25 años de democracia'

Poco a poco, fiel a su estilo, el líder del PSOE va desgranando compromisos que pondrá en marcha si gana las elecciones de 2004. Su lenguaje ha cambiado sensiblemente desde la pasada semana. Fue entonces, el domingo, cuando sus compañeros de partido le proclamaron candidato a la Presidencia del Gobierno, una decisión celebrada luego con un acto multitudinario en Madrid. Zapatero habla en primera persona y establece compromisos como futuro jefe de Gobierno.

El candidato socialista a la presidencia, en su recorrido ya permanente por toda España

pasó ayer el día en Salamanca, donde recordó a sus compañeros que los socialistas deben distinguirse por un talante 'humilde y sin pretensiones de dar lecciones a nadie'

Zapatero quiso remachar en Salamanca, ante 1.500 personas -otros dos centenares de simpatizantes no pudieron entrar al Palacio de Congresos porque se completó el aforo-, que en su programa de 'calidad democrática' incluye un régimen de incompatibilidades muy estricto para quien se dedique a la política. 'Quienes vengan con nosotros saben que tienen que venir a servir y no a servirse'. Zapatero criticó que en los gobiernos del PP haya ministros y presidentes del Senado que van y vienen del Consejo de Ministros a las candidaturas a presidentes autonómicos. Ahora mismo el titular de Medio Ambiente, Jaume Matas, y el de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, ocupan sus ministerios pero en cualquier momento anunciarán sus candidaturas a las presidencias de Baleares y Cataluña, respectivamente. Esperanza Aguirre acaba de abandonar la presidencia del Senado para ser candidata a la Comunidad de Madrid. Ella misma había sustituido a Juan Ignacio Barrero, que a su vez había abandonado la Cámara Alta para ser candidato a presidir la Junta de Extremadura. Zapatero anunció que si gana las elecciones pondrá en vigor un estatuto de neutralidad para las presidencias del Congreso y del Senado.

Su discurso fue muy crítico: 'Si gano las elecciones yo no haré como Aznar, que enfrenta a comunidades autónomas entre sí y desde el Gobierno ataca a unos ayuntamientos frente a otros. Se ha convertido desde hace dos días en el líder de la oposición de los ayuntamientos de Badalona y Barcelona'. Aznar destacó que en los ayuntamientos donde gobierna el PSOE se pagan más impuestos. Efectivamente, Badalona y Barcelona, gobernadas por los socialistas, están a la cabeza en el pago de impuestos. Los socialistas replicaron que precisamente esas dos ciudades también están a la cabeza en servicios públicos.

'Un gobierno debe estar al servicio del interés general y no al de un partido ni al de una confesión religiosa', dijo Zapatero, que acusó a Aznar de 'predicar un tipo de sociedad con valores rancios que no tienen nada que ver con el futuro y el progreso'. En esta ocasión también el líder socialista hizo un catálogo de propuestas del Gobierno que, a su juicio, no van a contribuir al desarrollo de España. 'Si siguen así, varias generaciones de jóvenes serán las de menos futuro en los 25 años de democracia'.

Zapatero no olvidó dónde estaba: Castilla y León, su región. Antes había escuchado al candidato a la alcaldía de Salamanca, Fernando Pablos, y al candidato a la presidencia de la Junta, Ángel Villalba. Éste dio las gracias a Zapatero 'por haber hecho que los socialistas recuperen el ánimo y la ilusión'. Como ocurre habitualmente en los actos en Castilla y León, donde el PSOE está en la oposición desde hace muchos años, el lamento por el escaso desarrollo de esta región fue constante. Además, tanto los candidatos como Zapatero invocaron con especial gravedad 'la sangría constante de inmigración hacia otros lugares de España' por falta de porvenir en esta zona.

Zapatero se comprometió a poner a esta región, si gana las elecciones, en la agenda de las prioridades. 'Si gano en 2004 se verá cuáles son las características de un castellano-leonés', dijo Zapatero tras asegurar que nunca había reconocido en Aznar 'los parámetros' de las gentes de esta región. Además, si tiene la oportunidad de gobernar le gustaría que se le reconociera 'no como un gran líder sino como un gran demócrata'.