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El PSOE de Marbella denuncia la construcción de viviendas en zonas verdes

García Marcos anuncia una querella por prevaricación contra los miembros del equipo de gobierno que aprobaron las licencias

El PSOE de Marbella ha denunciado ante la Junta de Andalucía la construcción de más de un millar de viviendas en zonas verdes y equipamientos industriales en la barriada de Las Albarizas, autorizadas por el equipo de gobierno Grupo Independiente Liberal (GIL). Los socialistas anuncian además una querella por prevaricación contra los ediles que aprobaron con sus votos las citadas licencias de obras, que afectan a siete promociones inmobiliarias, todas ellas en la misma calle.

La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Marbella, Isabel García Marcos, explicó que donde el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) contemplaba la construcción de un máximo de 2.000 viviendas, el GIL ha permitido 3.300. La edil acusó al equipo de gobierno de 'sobrexplotar' esta zona 'con multitud de licencias que transgreden la legalidad' y que se producen 'a expensas del suelo destinado a equipamientos, con el consiguiente perjuicio para los vecinos'.

Los convenios denunciados, -los dos últimos el pasado miércoles- fueron autorizados por comisiones de gobierno celebradas entre 1999 y 2001. Además de infringir el ordenamiento urbanístico vigente, todos los acuerdos contaron con informes contrarios de los propios técnicos municipales, que alertaron en sus escritos que los proyectos no se ajustaban a la legalidad.

El primero de ellos se refiere a la construcción de un edificio de ocho plantas en una parcela calificada como suelo no urbanizable industrial por el PGOU de 1986. En el registro mercantil figura la familia García Obregón como accionista de la empresa. Pero lo curioso de este convenio, suscrito con Alprosa SL y que data del 20 agosto de 1999, es que ni siquiera es acorde con el PGOU que el propio equipo de gobierno del grupo GIL aprobó en 1998.

Otra de las promociones es la que lleva a cabo Prohabitat S.A., también en suelo no urbanizable industrial. La licencia de obras, de 11 de julio de 2001, permite edificar 132 viviendas en tres bloques de seis plantas. 'En este caso se da la circunstancia de que en el acuerdo se habla de un convenio que no ha sido ratificado por órgano colegiado alguno', señaló García Marcos, que insistió en que los ediles gilistas lo apoyaron 'a sabiendas de su ilegalidad'.

Las cinco últimas licencias corresponden a la zona sur de Las Albarizas, anexa a la carretera N-340, y se refieren a suelo calificado como parques y jardines. El total de viviendas autorizadas a las empresas Tura SA y Proyersan en estos terrenos, destinados por el PGOU a un gran parque periurbano, es de 835, repartidas en cinco promociones.

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Política sin cambio

Según García Marcos 'a cambio de estos 88.700 metros cuadrados construidos, las dos sociedades obtendrán un volumen de negocio de 31.000 millones de pesetas en una zona verde pública'. Aseguró la edil que estos proyectos 'demuestran que no ha cambiado la política urbanística de Marbella', ya que una de las licencias la firmó el actual alcalde, Julián Muñoz.

García Marcos apuntó que la recopilación de documentos que ha elevado a la Junta ha sido producto de años de trabajo y de una larga investigación 'dificultada por el oscurantismo del GIL'. La portavoz socialista recordó también que los vecinos de la barriada han presentado 1.200 firmas para exigir infraestructuras, zonas verdes y equipamientos, y protestar contra de la masificación de la zona, en la que además está prevista la construcción de la primera fase del polémico Plan de Viviendas Sociales del grupo GIL.

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