_
_
_
_
_

La dimisión de los laboristas hace caer al Gobierno de unidad nacional de Sharon

El Gobierno de unidad nacional israelí, dirigido por el primer ministro Ariel Sharon, cayó ayer después de veinte meses de colaboración entre los laboristas y el partido conservador Likud. El motivo formal se basó en las discrepancias sobre un punto de la Ley de Presupuestos que prevé una ayuda de 150 millones de dólares para mejorar la seguridad de los asentamientos de Cisjordania y Gaza. La dimisión de los siete ministros laboristas es ejecutiva 48 horas después de su anuncio, con lo que hay un margen de maniobra para abordar la crisis. En todo caso, la salida de los laboristas del Gobierno no impidió que la mayoría de la Cámara aprobara en primera lectura los presupuestos. Si Ariel Sharon consigue forjar una nueva coalición, podrá evitar elecciones anticipadas. En caso contrario, los israelíes podrían ir a las urnas en febrero. 'Continuaremos gobernando con responsabilidad', se limitó a decir ayer el primer ministro.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_