La patronal de Guipúzcoa pidió 'reflexión serena' antes de rechazar el 'plan Ibarretxe'
Las empresas guipuzcoanas han empezado a recibir la carta pactada el pasado lunes en la reunión del comité ejecutivo y el consejo rector de Adegi, la patronal guipuzcoana. En el documento, que recoge todas las sensibilidades de la organización, el presidente de la patronal, José Martín Echeverría, confirma a sus asociados que tras la cita de los empresarios vascos con el lehendakari, Juan José Ibarretxe, el pasado día 9 se leyó un texto de 'consenso'. Asimismo indica que los representantes de Vizcaya y Guipúzcoa plantearon tras el encuentro 'la conveniencia de una serena reflexión antes de hacer público el documento'. El texto censuraba la propuesta soberanista.
La carta, acordada en los máximos órganos de la patronal, fue fruto de un acuerdo de equilibrio que evitó el pasado lunes la ruptura de Adegi. Esta patronal se encontraba al límite de sus posibilidades al plantear algunos miembros, tras las duras presiones del PNV los días anteriores, una nueva postura ante la propuesta de Ibarretxe, presentada en el Parlamento vasco el 27 de septiembre.
En la carta, Echeverría defiende a Román Knörr, el presidente de la patronal Confebask, por los ataques sufridos desde el PNV, tal y como quería el sector de Adegi, que era partidario de mantener lo pactado en el seno de la organización. 'Ante las graves descalificaciones personales de que hemos sido objeto los miembros de las cúpulas empresariales, pero especialmente y muy particularmente el presidente de nuestra confederación [Knörr], le manifesté personalmente mi apoyo y solidaridad y el de todos nuestros órganos de gobierno, poniendo en este sentido a Adegi a su entera disposición', indica.
Estabilidad y confianza
El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, descalificó a Knörr como empresario y le llamó 'funcionario' la semana siguiente al encuentro de la patronal con Ibarretxe. Asimismo, tanto él como el Gobierno vasco sugirieron que el texto era de Knörr y no de todas las patronales. Echeverría explica cómo en Confebask, tras una larga reunión en la que todos dieron pasos para lograr el 'consenso', se logró 'un texto común, que la representación de Adegi, una vez incorporados los criterios contenidos en el mandato que llevaba, aceptó en aras a preservar la unidad del colectivo empresarial'.
La carta señala que los empresarios necesitan 'estabilidad, certidumbre y confianza en todas las estructuras' de 'la sociedad para los inversores externos e internos, que favorezcan la competitividad, la creación de riqueza, el empleo y el desarrollo del espíritu emprendedor con libertad'.
