La batalla del 42
El jugador participa en las contiendas de la II Guerra Mundial. Le acompañan internautas de todo el mundo
Saltar al campo de batalla con un fusil en una mano y una granada en la otra. Correr hasta el transporte blindado, introducirse en él y conducirlo hasta el aeródromo entre el silbido de las balas. Bajar del vehículo y arrastrarse por el suelo para alcanzar los mandos de un caza, despegar y realizar una mortal pasada tras las líneas enemigas. Saltar en paracaídas, enfrentarse a un tanque y morir en el intento para, a los pocos segundos, volver a aparecer en la última base que haya conquistado el bando al que se pertenece y volver a la carga. Así hasta que uno de los dos ejércitos complete la conquista. De esta forma tan peliculera y poco real se han tomado la II Guerra Mundial los estudios Digital Illusions para ofrecer un producto que divierta desde el primer minuto.
'Battlefield 1942'
Desarrolla: Digital Illusions Distribuye: Electronic Arts Plataforma: Windows Género: Acción Edad recomendada: Mayores de 16 años Precio: 47,95 euros Internet: www.battlefield1942.com
Battlefield 1942 está ideado para ser jugado en Internet contra ejércitos formados por internautas, que pueden enfrentarse hasta 32 contra 32. El jugador, como aliado o como miembro del Eje, forma parte de una operación cuyo éxito se basa en la suma de las acciones del equipo, no de machadas individuales. En la campaña para un solo jugador las cosas tampoco varían. Los objetivos son genéricos: conquistar una zona, asaltar un puesto... Cómo se haga dependerá del jugador: no hay un guión o ruta que indique por dónde ir. En las partidas de un solo jugador, se ataca acompañado por robots controlados por ordenador y puede ocurrir que, sin pegar un tiro al aire, se pase a la siguiente misión ya que, éstos, independientemente de lo que haga el jugador, van a conseguir el objetivo. Curioso hecho que da cobijo a los cobardes virtuales.
A diferencia de otros juegos de este tipo, como Return to Castle Wolfenstein, aquí las muertes están penalizadas. No sólo con la demora de tiempo antes de volver a aparecer en el combate como tropa de refuerzo, sino que además se utiliza un sistema de tickets que determinan la victoria. Cada equipo parte con un número de tickets. Éstos se consumen por cada baja recibida y por cada puesto de control perdido. El primer equipo que se queda sin ellos pierde la batalla.
El entorno tridimensional recrea los cuatro grandes escenarios donde se llevaron a cabo las batallas de la II Guerra Mundial: Europa occidental, Europa oriental, el Pacífico y el norte de África. El jugador usa el ratón y el teclado para controlar al personaje. Al principio de cada misión, o en el intervalo entre cuando se muere y se reaparece, el jugador elige la mochila que desea llevar. Podrá ser médico, explorador, soldado de asalto o ingeniero. Cada cual posee unas cualidades únicas. Cuando un compañero o un enemigo pasa a mejor vida durante el combate, su mochila permanece un tiempo en el suelo. Si el usuario lo desea, puede cargarla en lugar de la que lleve, con lo que sus habilidades cambiarán sin necesidad de pasar por el limbo.
El título se ha lanzado con desajustes que afectan negativamente a la puntería y que están relacionados con la latencia. Para jugar en red hay que descargar un parche de 15 MB.
Sin llegar a las cotas de realismo de títulos similares, Battlefield 1942 es muy divertido. Ofrece acción sin complicaciones. De un vistazo se observa en qué punto se halla la batalla y se decide qué base se irá a conquistar o a defender. A partir de ahí todo vale.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.