Zapatero deja fuera de juego al PP con su presencia en el debate presupuestario

Zapatero descalificó los Presupuestos del Gobierno por 'antisociales y antiguos'. Para probar su denuncia, el dirigente socialista puso algunos ejemplos: la escasa preocupación del Ejecutivo popular por el problema del incesante incremento de los precios de la vivienda; la insensibilidad del PP ante el aumento de la inseguridad ciudadana -'la inversión en las comisarías de Madrid, donde los niveles de delincuencia son muy preocupantes, es cero', proclamó mostrando una página de las cuentas estatales-, o la insolvencia del Ejecutivo al presentar un Plan de Calidad Educativa que carece de memoria económica. El dirigente socialista defendió la receta de no gastar más, sino 'gastar mejor', y dio un consejo: 'Déjense de planes y hagan política'.

Montoro, nervioso y desfigurado, acusó a Zapatero de 'hacer teatro' en el hemiciclo y 'representar al socialismo de siempre, a la España del paro, despilfarro y en la cola del furgón de Europa'. El dirigente socialista desgranó entonces sus propuestas alternativas, entre las que destaca la creación de una Oficina Presupuestaria en el Congreso y una Agencia de Evaluación de las Políticas Públicas, la congelación de tarifas telefónicas y eléctricas, la reforma de la Ley del Suelo para abaratar el precio de la vivienda y la reorganización del capítulo de gastos para los problemas de seguridad.