Más de 400 universitarios bloquean la estación del AVE en Córdoba durante cerca de una hora
Los estudiantes protestan por las deficiencias del servicio de transporte al campus
Más de 400 universitarios colapsaron ayer la estación de trenes de Córdoba en protesta por las deficiencias del servicio que une la ciudad con el campus de Rabanales, al que se desplazan cada día 7.000 personas. Los estudiantes ocuparon durante casi una hora los andenes y la vía del AVE, que abandonaron a instancias de la Policía Nacional; exigieron soluciones a Renfe y a la Universidad, y afirmaron que tomarán otras medidas de presión si no se les atiende. Ni la compañía ferroviaria ni la institución académica quisieron responsabilizarse del problema.
El servicio de trenes a Rabanales, que funciona gracias a un convenio entre la Universidad de Córdoba (UCO) y Renfe, se encuentra bajo mínimos desde el 14 de octubre; un tramo de vía resultó dañado tras un descarrilamiento, y para repararlo se han suprimido ocho servicios diarios, de modo que sólo hay cuatro trenes por la mañana. Ayer se averió el que debía salir a las 8.45, el más utilizado, y los estudiantes, tras esperar sin éxito que fuese sustituido por otro, tomaron los andenes y la vía del AVE.
Cuatro unidades de la Policía Nacional se desplazaron a la estación y advirtieron a los universitarios del riesgo que corrían. Fuentes de Renfe explicaron que el AVE de las 10.00 sufrió un retraso de pocos minutos, pero que sí hubo otro tren que no pudo salir 'porque no se daban las condiciones de seguridad'. Era, según la compañía, precisamente el que debía transportar a los manifestantes a Rabanales, 50 minutos más tarde de lo previsto.
Los estudiantes elaboraron un escrito que remitieron al responsable de Regionales de Renfe y al Vicerrectorado de Infraestructuras de la UCO. En él les responsabilizaban del problema, acusándoles de no haber provisto un servicio complementario de autobuses mientras se realicen las reparaciones de la vía, que durarán hasta el 25 de octubre, y de no planificar el impacto del traslado de nuevas facultades al campus sobre el servicio de transporte.
'Es una acumulación de retrasos e incumplimientos; siempre se nos trata como viajeros de segunda', aseguraba Olmo Linares, estudiante de Biología. 'El precio del abono semestral ha subido nueve euros desde el año pasado', recalcaba Carmen Palacios, 'y cada vez hay menos trenes'. 'Llegamos siempre tarde a clase y a las prácticas', aseguraba María Diáñez, estudiante de Veterinaria.
Ni la UCO ni Renfe admitieron responsabilidad alguna. José Manuel Muñoz, vicerrector de Infraestructuras, declaró que 'la Universidad no gestiona trenes; bastante hacemos con pagarlos'. Señaló que la institución educativa asume más del 50% del coste de cada billete (los alumnos pagan 79 euros por un abono semestral), y que eso supone gastos de más de 300.000 euros al año.
Desde Renfe se insistió en que los trenes a Rabanales son un 'servicio a la carta' para la Universidad, y que los horarios establecidos para reparar la vía dañada se pactaron con el Vicerrectorado, que decidió cuáles eran las horas más adecuadas para suspender el tránsito, y que no quiso hacerse cargo de un servicio de autobuses alternativo.
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