_
_
_
_
Reportaje:

El ciclista total

José Casarrubios, un maestro industrial de San Vicent del Raspeig, lleva diseñadas 80 bicicletas originales

José Casarrubios Moreno es un inventor atípico. La sección práctica de su cerebro la emplea en resolver problemas de espacio en la construcción de edificaciones, donde aplica sus diseños exclusivos de escaleras, balcones, barandas de adorno y contrapuertas. Este hábil metalúrgico es maestro industrial y delineante en San Vicent del Raspeig (L'Alacantí). La parte fantástica de su talento la dirige a crear bicicletas originales. Ya ha ideado y hecho realidad unas 80 bicis bien distintas, algunas 'discordantes', como él mismo reconoce.

Si Leonardo da Vinci no logró sacar de sus mesas de dibujo los bocetos de bicicletas que plasmó en la obra Codez Atlánticus, este experto en forjados y yunque las ensambla con cierta facilidad aprovechando piezas de aquí y allá. Uno de los problemas que se le presentó para dotar de neumático a una de sus grandes creaciones lo resolvió adaptando una tubería de regadío como cubierta, que tensó interiormente con un cable de acero para que no se moviera de la llanta.

Las 80 invenciones de Casarrubios constituyen una parte de su colección de ciclos, compuesta por más de 200, que le ocupan toda una nave industrial. Su amor a los velocípedos también se ha traducido en una colección de un centenar de miniaturas. El pendiente-bicicleta que le sisó a una de sus hijas es la pieza más diminuta de esta manejable recopilación.

'Todo empezó cuando mi padre me regañó por dejar a mi esposa en casa la mañana de los domingos, cuando salía sólo con mi hijo al campo en las bicis. Tantas cosas raras que inventas, -me dijo- no podías hacer algo y acabar con este enojo. Dos días después ya había hecho una bici doble, un tandem'.

Una vez que Casarrubios se adentró en los entresijos de las bicis, las cenicientas de la tecnología, ya no ha podido dejarlas. 'Uno de mis fines consiste en demostrar a la gente que con imaginación y unas horas de dedicación se puede hacer una bici. Sólo son cuatro hierros, dos de ellos redondos para que giren. Debemos manipular las cosas y no limitarnos a ir a la tienda y pagar 360 euros por una de estas máquinas', confiesa este desmitificador.

Canguro sin cadena, tumbona horizontal, triple señoras, araña zancuda, fontanero, gusano cabeza, chepa roja, ecológica, carrito helados... estos son algunos de los nombres con los que ha bautizado a sus escuálidas compañeras. Con cada creación resuelve dificultades concretas. Una de sus invenciones es un triciclo sobre ruedas de diferente diámetro. 'Le he colocado la rueda mayor que disponía, la más gruesa y la más pequeña', comenta señalando los ejes especiales conseguidos para su normal rodamiento.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Impulsor de los populares 'días de la bicicleta' en San Vicent y Alicante, Casarrubios aprovecha tales eventos para sacar sus inventos a rodar, lo que provoca la hilaridad del público. Está orgulloso de haber ayudado a un vecino que le pidió que le hiciera una bici especial para que pedaleara su hijo ciego. Y se muestra algo dolido por la falta de inspiración cuando se propuso inventar una máquina para envolver polvorones. Sonriente y jovial, Casarrubios se niega a vender y mezclar el dinero con sus engendros. 'Estoy peor de lo que yo creo'.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_