El fiscal pide el archivo de la denuncia contra Inmaculada Gálvez y afirma que la policía marbellí se extralimitó

La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha solicitado a la sala de lo Civil y Penal el archivo de la denuncia planteada por el jefe de la Policía Local de Marbella, Rafael Pozo Izquierdo, contra la parlamentaria de Los Verdes Inmaculada Gálvez. El fiscal, aunque reconoce que Gálvez reaccionó con cierta violencia a la orden de abandonar un cafetería municipal que iba a ser desahuciada, precisa que, antes, 'las extralimitaciones de los agentes de la autoridad no contribuyeron a la creación de un orden público constitucionalmente respetable'.

Jerónimo Garvín, el magistrado instructor, deberá ahora decidir si archiva la denuncia o si por el contrario abre un procedimiento abreviado contra la parlamentaria andaluza. En este último caso, la única parte acusadora en el procedimiento sería el Ayuntamiento de Marbella.

El fiscal, después de revisar las últimas diligencias propuestas por Inmaculada Gálvez, en particular la declaración de varios testigos, y ver un video grabados en las inmediaciones de la cafetería, considera que la Policía Local tuvo una 'actuación desproporcionada desde el principio' por lo que no se puede imputar 'responsabilidad alguna' a la denunciada. Los hechos ocurrieron el 19 de diciembre de 2000 en Marbella.

Gálvez fue denunciada por Rafael Pozo por varios delitos (atentado, injurias, coacciones y vejaciones) aunque sólo prosperó el primero. El jefe de la policía de Jesús Gil asegura que la parlamentaria le lanzó una patada cuando era sacada a la fuerza del interior de la cafetería Las Chapas, un establecimiento de recreo de la tercera edad de propiedad municipal. Inmaculada Gálvez era abogada de la concesionaria del café, María Isabel Guerrero Rodríguez, y como tal acudió al acto de desalojo.

Aunque la orden de abandonar el local sólo afectaba a la concesionaria, la Policía Local exigió la salida 'de cuantos estaban en la sede del hogar del pensionista', precisa el fiscal. Esta conducta de los agentes supone una 'extralimitación notoria' en su actuación.

El fiscal del TSJA reitera más adelante que la policía actuó 'con violencia contra todos', tanto contra quienes se negaron a abandonar la cafetería como contra quienes no se opusieron. 'Esto excedía del objeto de sus funciones haciendo uso o abuso de autoridad', señala el fiscal.

No obstante, el auto precisa también que la parlamentaria tuvo reacciones 'airadas, insultantes y agresivas' ante el desalojo a la fuerza por parte de los agentes municipales, aunque a continuación recuerda que los incidentes con Inmaculada Gálvez no ocurrieron al 'inicio de su negativa' a acatar las órdenes de los agentes sino 'cuando ya se había actuado contra ella con violencia y enérgicamente. sin concederle respiro'. Con este auto el fiscal queda fuera del procedimiento, al margen de que lo decida la sala.