102.000 'telehermanos'

La plantilla de grandes hermanos sigue creciendo. El próximo domingo, otros 12 desconocidos vendrán a completar la nómina de jóvenes en busca de la fama que arrastra la televisión. En esta edición, 102.938 aspirantes han probado suerte. De este alud han sido seleccionados 25. Competirán 12, y el resto permanecerá en el banquillo de reserva. También buscarán el éxito ocho jóvenes vascos, cuatro chicas y cuatro chicos, que el próximo miércoles se encerrarán en Basetxea (ETB-1, 22.00), versión en euskera de Gran Hermano, que inicia su segunda edición.

Como prólogo de GH-4, Tele 5 recupera esta noche (21.30) a los ganadores de los tres anteriores: Ismael, Sabrina y Javito. Para animar el debate, también asistirán algunos de los más polémicos telehermanos, que en las últimas semanas han destilado sus conflictos con chabacanas broncas televisivas. En este especial no faltarán María José y Jorge, ni Raquel y Elba, que han utilizado las cámaras para lavar sus trapos sucios en una riada de insultos, difamaciones y groseras anécdotas sobre su vida privada y su catadura sexual. Con todo, Tele 5 entiende que el concurso no es más que un reflejo de 'sentimientos de varias personas a flor de piel como si de una telenovela se tratara'.

Al frente de GH estará una vez más (la tercera, tras el paréntesis de Pepe Navarro) Mercedes Milá, que regresa 'encantada' y con intención de 'servir bien la mesa'. No oculta la periodista que sigue sintiéndose impresionada por ' la fortaleza' del programa. 'Cada vez es un grupo diferente de gente, con comportamientos distintos'. Pero elude entrar a valorar la conducta de los ex concursantes. 'Todas las personas que han participado en Gran Hermano son respetables. Juzgo lo que han hecho en la casa. Lo que hacen después es una cuestión completamente al margen de mi trabajo'.

Milá expresa también su respeto por Operación Triunfo, cuya segunda edición saltará a las pantallas de TVE-1 a principios de octubre. Pero marca las distancias: 'Presento Gran Hermano, que es el padre de la criatura. Algunos remedos, como OT, han avanzado. Otros no han generado nada nuevo'.

Los directivos de Tele 5 evitarán competir directamente con el concurso de Televisión Española. Al fin y al cabo, los dos programas están producidos por la misma empresa: Endemol, a través de sus filiales Gestmusic y Zeppelin. Un duelo duelo fratricida que todavía no está resuelto. Tele 5 no tiene cerrado el día de la semana en el que se emitirá el programa nocturno de nominaciones y expulsiones. Lo único fijo es la tira diaria de resúmenes: 15.30.

La periodista ha aceptado tras obtener de Tele 5 un compromiso de continuidad. De modo que, tras Gran Hermano, estará al frente de un espacio a su medida: con contenidos periodísticos. 'Me da tranquilidad ver mi horizonte laboral dentro de la cadena. No era tanto una cuestión de dinero como de una seguridad en el trabajo', asegura.

Los nuevos inquilinos de la videocasa, que pasarán 100 días encerrados, todavía no tienen nombre. Sus rostros serán desvelados el próximo domingo, cuando GH-4 alce el telón oficialmente. Milá recalca que nunca entraría en la casa por 'falta de valentía y un exceso de pudor'.

Quienes no tienen tantos reparos son los ocho jóvenes que convivirán durante 12 semanas en un caserío de Euskadi. En el programa final, allá por diciembre, serán los telespectadores quienes decidirán el ganador. El premio es un viaje alrededor del mundo valorado en 18.000 euros.

El programa pretende mostrar un grupo de jóvenes 'que representan a un amplio sector de la sociedad vasca', según señala ETB. Así, Martín Uranga, el más veterano, con 36 años, procede de Zarautz, y la televisión pública vasca lo define: 'Un hombre activo y decidido. Tiene madera de líder. Ha trabajado pescando salmón, talando árboles y de matarife'. Competirá, entre otros, con Berta, una irunesa de 18 años que 'ha faltado a su examen de EGA por participar en el concurso'; y con Jokin Leniz, de 21 años, con 'voz ronca, como de estar siempre de fiesta' y que 'no concibe su vida sin una mochila y una ikurriña'; la más urbanita, Eztizen Eizmendi, que a sus 24 años 'le gusta tocar el txistu', y con Ager Yurrebaso, de 26 años, un 'forofo del Athletic' que ha decidido llevarse a la casa su 'navaja multiusos'.