_
_
_
_
ELECCIONES EN ALEMANIA

Los liberales se desmoronan y quedan lejos de sus objetivos

Debió de ser uno de los momentos más amargos de la vida de Guido Westerwelle, quien incluso había llegado a proclamarse como candidato a canciller: delante de un mar de cámaras, el presidente del Partido Liberal Democrático (FDP) tuvo que constatar ayer lo 'decepcionante' que es para él y para los suyos un resultado que los sitúa por detrás de su gran competidor, Los Verdes, el otro partido pequeño de la política alemana. Detrás de Westerwelle aún tronaba, blanco sobre azul, un gigantesco 18: la cifra mágica, proclamada a los cuatro vientos, que el FDP pretendía alcanzar en estas elecciones para jugar en las grandes ligas del SPD y la CDU-CSU.

A la postre, ni siquiera se alcanzó la mitad de lo presupuestado en este ejercicio de autosugestión. En una entrevista con la televisión alemana, Westerwelle culpó casi exclusivamente de la derrota a uno de sus tres vicepresidentes, Jürgen W. Möllemann, que ayer fue obligado a dimitir de este cargo. A inicios del verano, este político, polémico desde hace años por sus afición al populismo, había sumido en una profunda crisis a los liberales con sus fuertes críticas en contra del Gobierno de Israel y uno de los integrantes del Consejo Central de los Judíos en Alemania. En aquel entonces, en medio de acusaciones de que la intención oculta de esta postura con tintes antisemitas era ganar votos musulmanes, el FDP forzó a Möllemann a disculparse y a no pronunciarse más sobre el asunto.

Más información
Stoiber perdió terreno en la recta final

Pero el vicepresidente del FDP no cumplió su palabra y la semana pasada distribuyó un escrito en el que volvía a arremeter sobre el mismo tema. 'Esto no fue acordado conmigo', espetó ayer Westerwelle, antes de anunciar que la dirección del partido pedirá hoy a Möllemann su dimisión como vicepresidente. El líder del FDP evitó entrar en detalles sobre cuáles otros factores pudieron haber motivado el mal resultado.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_