La marcha de Mosquera pone en cuestión el futuro de Unidad Alavesa
Ernesto Ladrón de Guevara se perfila como su sucesor en el partido
Unidad Alavesa, el partido que gobierna en coalición con el Partido Popular en la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria, se ha ido desinflando, en militantes y votos, durante los últimos años, y ahora dice adiós a su líder, Pablo Mosquera.
El secretario general, que ha dirigido la organización desde sus inicios, ha decidido marcharse para dirigir un hospital público en Lugo, la ciudad donde nació hace 55 años. Hace meses que se especulaba con esta posibilidad, y ayer lo confirmó el propio Mosquera. 'Después de muchas conjeturas, por fin ahora sí va en serio', explicó. 'Es una decisión personal'.
Mosquera, que ha aparecido en varias ocasiones en las listas de objetivos terroristas, aseguró que no se marcha por ETA: 'Me voy porque quiero, a hacer lo que siempre he hecho'. El dirigente foralista, médico de profesión, ha aprovechado su antigua relación con Manuel Fraga, presidente de la Xunta, y su currículo como director de hospitales en Barcelona y Vitoria para encontrar un destino. Deja vacante el puesto de diputado foral de Juventud y Deporte, y también la dirección de su partido. Desde el nacimiento de UA en 1990 como una escisión del PP en Álava, Mosquera ha dirigido la formación foralista con su peculiar estilo, directo y populista. Su irrupción en la escena política vasca fue una sorpresa. Propugnando el alavesismo frente al nacionalismo, aunque él es militante de ELA, el partido llegó a obtener en 1994 cinco escaños en el Parlamento vasco, convirtiéndose en el segundo partido de Álava con 25.469 votos (a 4.500 del PNV).
Sin embargo, su dicurso fue agotándose en la medida en que fue asumido por otros partidos y se debilitó internamente al decidir, en 1996, formar gobierno en el Ayuntamiento de Vitoria con José Ángel Cuerda (PNV), lo que originó una gran escisión antes de las autonómicas de 1998. UA ha pasado ahora a tener tan sólo dos representantes en el Ayuntamiento y las Juntas Generales. En las últimas elecciones, sus miembros entraron en las listas del PP como independientes.
La marcha de Mosquera a Galicia coloca a UA en una situación casi crítica, con pocas salidas posibles. Una posibilidad está en incorporarse al PP, como ocurrió en las autonómicas del año pasado. Otra, más drástica, la disolución. La solución de Mosquera es ambigua: 'Su futuro será el que quieran los ciudadanos'. En octubre está previsto un congreso extraordinario que clarificará la situación.
Como problema más inmediato queda el de la sucesión de Mosquera como secretario general y diputado foral. El candidato mejor colocado es Ernesto Ladrón de Guevara, un ex dirigente del PSE que se ha incorporado a UA como portavoz e ideólogo. La dirección del partido elegirá al sucesor mañana, y el lunes se ha previsto el relevo de Mosquera en el Consejo de Diputados.
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