Tres familias son desalojadas de sus viviendas cada día por impago

Una media de tres familias cada día pierden su casa por orden judicial al no poder pagar la hipoteca, el crédito o el alquiler comprometido. Desde enero, los jueces han firmado 750 desahucios, aunque antes de que acabe 2002 serán unas 1.500 las familias que terminarán con los muebles en la calle. De ellas, un 5% corresponde a personas mayores con ingresos inferiores a los 250 euros.

Pero el número de desalojos judiciales se ha reducido en los últimos tres años. En 1999, nueve familias eran expulsadas cada día de sus casas. ¿La causa de la disminución? Según fuentes jurídicas, el descenso de los tipos de interés, la reducción del paro y la entrada en vigor de la Ley de Enjuiciamiento. Esta norma permite al juez paralizar el embargo si el afectado abona las mensualidades atrasadas. Hasta la aprobación de la ley, bastaba con que el banco o el casero presentasen la demanda para que la vivienda terminase subastada. Del precio obtenido -generalmen-te inferior al real-, el banco se quedaba con las mensualidades impagadas y las costas. El resto del dinero, si quedaba algo, iba a la familia desahuciada. Por eso, por cantidades adeudadas muy pequeñas (un par de mensualidades), una familia podía ver cómo salía a subasta su casa y quedarse con las manos vacías.