La princesa Diana sigue provocando polémicas y homenajes
Cinco años después de su muerte, Diana de Gales sigue viva en la memoria del pueblo británico y levantando olas de controversia. Su leyenda de princesa infeliz, neurótica y manipuladora, continúa creciendo con nuevas revelaciones sobre sus presuntas conquistas sentimentales y su capacidad de seducción. Incluso el Rey Juan Carlos quedó impresionado con la joven, según sugiere su anterior guardaespaldas, Ken Wharfe, en un libro publicado esta semana, Diana, un secreto muy bien guardado, y que ha enfurecido a la familia real británica. Lo cierto es que no se logra el consenso en cualquier aspecto relacionado con una mujer que despertó la pasión en un pueblo poco dado a los arrebatos sentimentales. Pero lo que sí tiene ya asegurado en la historia es su positiva contribución a la preservación del futuro de la corona británica. De la trágica desaparición de lady Di, a los 37 años, ha nacido una monarquía más humanizada y menos distanciada del pueblo. Hoy, fecha del aniversario de su muerte, la familia Windsor la recordará 'en privado y a su manera', según ha dado a conocer el palacio de Buckingham. Althorp, la mansión de los Spencer donde está enterrada la princesa, estará cerrado hoy al público. Y, aunque no se anticipan grandes aglomeraciones, británicos y extranjeros se acercarán al palacio de Kensington, su residencia en Londres durante su matrimonio, con mensajes de despedida y ofrendas florales.
