El Catedrático Morales asegura que "El nacionalismo vasco ha entrado en una línea que dificulta mucho el diálogo

El catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad Carlos III, Antonio Morales, aseguró hoy que "el nacionalismo vasco ha entrado en una línea que dificulta mucho el diálogo", debido a la "radicalidad" con la que se expresa en estos momentos, y deseó en que "en algún momento" el PNV vuelva a su "tradición más moderada". Asimismo, el profesor, que ha impartido en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) el curso magistral "Idea y realidad de España en la historia", consideró que "hay razones suficientes y pruebas" para la adopción de las medidas que se han tomado frente al "nacionalismo radical". El catedrático, que mostró su convicción de que "el nacionalismo constitucional permite perfectamente que existan dentro de él nacionalismos culturales", señaló que el caso catalán "exige un diálogo complejo", y añadió que "la participación del nacionalismo catalán a la gobernabilidad" de España "es indiscutible". En este sentido, subrayó que "se mantiene dentro de los planteamientos democráticos y afirma la idea de España". Por su parte, el nacionalismo gallego también ha tenido un comportamiento "pragmático y participativo", según Morales. Para el catedrático, "el nacionalismo aporta sentido de identidad colectiva" y, por tanto, "conservación" de los rasgos culturales, pero puede plantear problemas si pretende establecer una "homogeneización" sin respetar "los derechos" y es "peligroso" si ese proceso se hace "quitándote del medio". Del mismo modo, consideró un error entender el nacionalismo español como "algo retrogrado" o propio del "franquismo" y resaltó en cambio el carácter liberal de este nacionalismo que nació con la ilustración y el "liberalismo de las Cortes de Cádiz".

ENSEÑANZA DE LA HISTORIA

Mientras tanto, el catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Valladolid, Julio Valdeón, que ha impartido el curso magistral junto con Morales, reflexionó sobre la enseñanza de la historia y apuntó que algunos libros de texto la explican "de forma muy poco rigurosa y con libertad absoluta". En su opinión, "se está insistiendo demasiado en lo particular y olvidando lo común", por lo que creyó necesario poner más "énfasis" en los rasgos comunes. Una cuestión que no depende tanto de las reformas educativas como de lo que ocurre finalmente en el aula. Además, recordó que en la distribución de los temarios el mayor porcentaje corresponde a lo común, mientras que las comunidades autónomas pueden regular el 45 por ciento, si tienen lengua propia, o el 35 por ciento, en los demás casos.