Aranjuez inicia la expropiación del terreno destinado a canal olímpico

El Ayuntamiento de Aranjuez ha iniciado el proceso de expropiación del PAU (Plan de Actuación Urbanística) de las Cabezadas. En estos terrenos está prevista la construcción del canal de remo olímpico y el de aguas bravas ante la candidatura olímpica Madrid 2012. El expediente que permite este trámite fue aprobado por Comisión de Gobierno y cuenta con el respaldo de los dos grupos de oposición: PSOE e IU.

El expediente de expropiación afectará a todo el PAU, que tiene 202 hectáreas y está situado en la carretera de Toledo, junto al cementerio municipal y a la multinacional Lever Ibérica. Aunque su superficie total es de 2.021.000 metros cuadrados, el aprovechamiento urbanístico real previsto es de 630.000 metros. Estos terrenos pertenecen a 40 propietarios que tienen un centenar de fincas. 'Este suelo está actualmente calificado como urbanizable no programado y no se cambiará esta calificación. El PAU se desarrollará tal y como estaba previsto en el Plan General de Ordenación Urbana de 1996, que ya especificaba que se haría mediante expropiación', dice Miguel Ángel Gálvez, alcalde en funciones de Aranjuez.

'Nuestra idea es terminar el proceso a finales de este año o principios de 2003. Para enero del año que viene está previsto que el Comité Olímpico Español decida entre las dos ciudades que optan a ser sedes olímpicas: Madrid y Sevilla. Para entonces tendríamos que tener ya el suelo a disposición del consorcio Madrid 2012', dice el alcalde en funciones.

El proyecto de canal de remo necesitaría de una inversión de 24 millones de euros a pagar por el consorcio y la Comunidad de Madrid. El Ayuntamiento sólo tendría que aportar el suelo (el PAU de las Cabezadas), actualmente en manos privadas, de ahí la urgencia en su tramitación.

Tanto PSOE como IU respaldan el inicio del expediente de expropiación, aunque consideran que la actuación del Consistorio, gobernado por el PP, ha sido algo precipitada, ya que podría haberse buscado algún lugar alternativo, como las graveras del Jarama, que podrían haber sido recuperadas.