La pesadilla de Jardel

'Estoy cansado de sufrir. Necesito ayuda médica y viviendo en Portugal no puedo dejar de pensar en mi familia'. El delantero brasileño Mario Jardel (Fortaleza, 1974), máximo goleador europeo la campaña pasada, anunció ayer que se marcha, que deja plantado a su equipo, el Sporting de Lisboa, porque no puede superar su reciente divorcio. 'Necesito comprensión, no puedo estar en el mismo ambiente y en la misma casa en los que viví con mi mujer', clamó desesperado el delantero, al que aún le restan dos años de contrato con el club lisboeta, ayer por la tarde desde la sede del Sindicato de Futbolistas Profesionales de Portugal.

Mario Jardel tiene dos hijos y hace poco se escapó de la concentración del Sporting para viajar a Brasil, donde inició los trámites de separación de su mujer, Karen, con la que llevaba siete años de matrimonio. 'Nuestras vidas están tomando rumbos diferentes', confesó el ariete, que asimismo negó que su renuncia a jugar con la entidad lisboeta se deba a 'temas deportivos'. El jugador negó tener ninguna oferta 'del Barcelona o del Valencia' y aseguró que su intención es la de cumplir su contrato 'cuando me sienta con fuerzas para regresar'.

El Sporting de Lisboa, a través de un comunicado oficial, advirtió al jugador: 'Dentro de los límites de la racionalidad empresarial y si fuera posible, esta sociedad intentará ser comprensiva con el hombre y el deportista'. El Sporting de Lisboa criticó 'la oportunidad y el lugar' para hacer públicos los deseos del ariete y señaló que 'alguien trata de marear' al brasileño. Jardel, por su parte, insistió en que tiene 'derecho' a tomar la decisión de no comenzar la temporada. Jardel ha anotado 219 goles en los 213 partidos que ha disputado en Portugal, primero en el Oporto y más tarde en el Sporting.