ITALIA, EN TORRELAVEGA
Torrelavega, la segunda ciudad de Cantabria, fue ayer escenario de música y arte de primera categoría de la mano del escultor italiano Vinicio Momoli, el gran jazzista Paolo Fresu (formando trío con Antonello Salis y Furio de Castri) y la pintora Pilar Cossio, cántabra con currículo profesional repleto de vivencias en varias ciudades de Italia y, en los últimos años, en París. Fresu, reconocido en dos ocasiones por la crítica especializada francesa como el mejor músico europeo de jazz, cerró por la noche con un concierto los actos inaugurales de la exposición de Momoli en el Centro Nacional de Fotografía torrelaveguense, primera etapa de una unión artística que continuará en Siena (Italia) el próximo día 28, en la famosa abadía de Spineto, convertida en centro de arte contemporáneo y que en esta ocasión acogerá música, escultura y pintura en una instalación meticulosamente trabajada por Mamoli y Cossio hasta lograr esa sensación de unidad que está en el origen del arte y del hombre y que ambos artistas ya lo experimentaron en los espacios de una vieja fábrica abandonada de Sens, cerca de París, en marzo pasado, y ahora llegan a Torrelavega de la mano del Ayuntamiento que preside el regionalista Francisco Javier López Marcano, ex consejero de Cultura del Gobierno cántabro.-
