La Policía ha desarticulado 101 redes de explotación sexual de inmigrantes en España en el primer semestre del año

El comisario jefe de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación, Carlos Botrán Prieto, destacó hoy que la Policía ha desarticulado 101 organizaciones de explotación sexual de inmigrantes desde enero, cifra que prácticamente iguala al número desarticulado en año pasado, que fue de 122, según informaron fuentes de la Universidad Europea CEES.

Durante su intervención hoy en los cursos de verano de la Universidad Europea CEES que se celebran en Altea (Alicante), Carlos Botrán Prieto explicó que en los seis primeros meses del año la Policía ha detenido a 439 responsables de estas redes, y ha liberado a un total de 580 mujeres que habían sido engañadas en sus países de origen para ejercer la prostitución en España.

El grupo más numeroso de inmigrantes captadas para su explotación sexual en España procede de países latinoamericanos, -como Colombia, Brasil y en menor medida Ecuador y República Dominicana-. El segundo grupo proviene de países del Este de Europa -de Rumanía, Ucrania, Bulgaria y Eslovenia-, mientras que en tercer lugar se encuentran las mujeres procedentes del África Subsahariana, principalmente de Nigeria y en un número mucho menor de Marruecos.

Según Botrán, el tráfico de mujeres nigeriano se caracteriza por el hecho de que suelen ser vendidas por sus propios familiares a miembros de las redes, que cuentan con permisos de residencia legal en España.

El comisario jefe de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación indicó que las mujeres procedentes de Latinoamércia entran principalmente por avión, y para evitar los interrogatorios en los aeropuertos españoles donde pueden ser detectadas utilizan otros aeropuertos del espacio Schengen, como Amsterdam, París o Lisboa, donde entran "con tan sólo mostrar el pasaporte y el dinero necesario para justificar que disponen de medios".

Las mujeres procedentes de Europa del Este suelen entrar en la Unión Europea como turistas, cruzando por carreteras secundarias las fronteras de Polonia, Hungría y la República Checa con Alemania, o bien utilizando los visados Schengen de turistas de corta duración o portando pasaportes falsos de aquellos países en los que no se necesita visado.

Botrán indicó que el tránsito de mujeres procedentes del África subsahariana se produce a través de Mali y Argelia hasta cruzar a Marruecos y, una vez allí, atraviesan la fronteras hispano-marroquí por Ceuta o Melilla utilizando tarjetas de residentes en ciudades marroquíes fronterizas.

Así mismo, Botrán señaló que el modo de operar de las redes de su procedencia, de modo que las redes africanas recurren a los pasaportes falsos, que suelen ser estadounidenses alterados, en los que se ha sustituido la foto original por la de la mujer nigeriana.

Según Botrán, la utilización de documentos falsos está "alcanzando cuotas preocupantes", ya que no existe penalización de estas conductas y sin embargo genera elevados beneficios, según informaron las mismas fuentes.