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EL ENREDO
Columna
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'Josemari Notajunto'

1. Lo mejor del debate sobre el estado de la nación empieza cuando acaba y dos, cinco, siete ministros se abalanzan contra micrófonos y cámaras de televisión para decir que Aznar ha ganado. A ver si entre los nuevos hay un digno sustituto de Juan José Lucas, no sé, alguno que compare a Aznar con Alejandro Magno o Julio César. Qué melancolía, qué grandes ministros se han perdido. ¿Quién reemplazará a Celia Villalobos en el ministerio de la Risa? ¿Y lo de Posada y Birulés? ¿Volverá a haber ministros invisibles como ellos?

2. Mariano Rajoy sí que está hecho polvo. Cada vez que pasa por delante del despacho del presidente le cambian de ministerio. 'Así no hay forma de acomodarse', se queja. Últimamente evitaba pasar y la crisis se retrasaba, pero Aznar le localizó por el interfono. '¿Qué haces, Mariano?' 'Pues por aquí, leyendo el As'. 'Voy a cambiar el Gobierno'. '¿Y cuántos me tocan?'. 'Tres'. Mariano no pregunta qué ministerio, sino cuántos. Vicepresidente primero, ministro de Presidencia y Portavoz. 'Por las mismas podría ser también capitán de la Copa Davis', murmuró Rajoy, que ya ha pasado por tropecientos ministerios. 'A lo mejor es que lo de la sucesión es como el Gran Prix de la Primera, y consiste en ir superando pruebas. Cualquer día me suelta una vaquilla en los jardines de Palacio'.

A ver si entre los nuevos hay un digno sucesor de Lucas, alguno que compare a Aznar con Alejandro Magno o Julio César

3. Habrá que ver si, además de cambiar el Gobierno, Aznar se cambia a sí mismo o sigue instalado en lo que es su aportación a la teoría política de entresiglos: el Notajuntismo. Cuando alguien le contraría, replica: 'Pos ahora no tajunto'. Aznar se presentará en el Congreso con el siguiente discurso: 'Ñora Sidenta, ñoras y ñores putados: tras seis años de Gobierno puedo decir con orgullo que no majunto con el PNV ni con el Gobierno vasco, no majunto con los dirigentes del PSOE ni con los presidentes de autonomías socialistas, ni majunto tampoco con los líderes sindicales. Ni majunto, ñorías, con el rey de Marruecos ni con su primer ministro. ¡Ni majunto con obispos, ni majunto con estudiantes, ni majunto con parados, ni majunto con inmigrantes!'. Aplausos en los bancos de la mayoría. Por no hurtar nada: últimamente tampoco sajuntaba con CiU. 'Jaleando la huelga, ¿eh? ¡Pos ahora no tajunto!', le dijo a Jordi Pujol. Así debió ser también la crisis de Gobierno. Citó a Celia Villalobos: 'Dime, presidente, rey del mambo'. 'No porfíes, Celia, que ya no tajunto'. 'Ay, qué desgracia más grande'. Y así con todos. (Rajoy iba recibiendo a los nuevos: 'Aquí, si te lo montas, se vive como Dios').

4. Pero sería demagógico afirmar que el presidente no sajunta con nadie. Sajunta con Georges Bush. Muy buena la idea de sus asesores de imagen: después de una huelga general, aparecer en los periódicos con los pies encima de la mesa junto a Bush, y explicar que estaban discutiendo sobre quién la tiene más larga (la zancada). Por cierto, hay que ver, qué curioso, Bush, parecía un zoquete y ha ido a buscarse como amigo nada menos que al gran Aznar, conocido en el mundo entero por Josemari Notajunto.

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