La defensa pide que se anule el juicio por el vídeo sexual de Pedro J. Ramírez

Seis de los siete abogados que actúan como defensores en el caso del vídeo sexual del director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, exigieron ayer la anulación de todo el proceso judicial al entender que la instrucción estuvo viciada y vulneró el derecho constitucional al secreto de la correspondencia. La Audiencia de Madrid inició ayer tarde el juicio contra los siete acusados de la grabación y distribución del vídeo. Los letrados esgrimieron que la instrucción del proceso fue guiada desde El Mundo.

Las acusaciones rechazaron que se hubiese violentado la legalidad durante la instrucción.

En la fase de cuestiones previas, el abogado de Exuperancia Rapú (la mujer guineana que aparece en el vídeo junto a Ramírez) tachó de 'ilegal' el decomiso de las cintas de vídeo intervenidas el 16 de octubre de 1997 en una estafeta de Correos de Madrid. Según este letrado, el jefe de seguridad de esa oficina ordenó 'el secuestro' de 18 cintas sin la previa y preceptiva orden judicial. 'Esa prueba documental [las cintas] se obtuvo ilícitamente', y antes incluso de que el afectado interpusiese la denuncia. Este letrado sugirió que Ramírez utilizó sus influencias políticas y policiales para vulnerar la ley y lograr así la retención de las grabaciones.

El abogado Emilio Rodríguez Menéndez, que ayer acudió al juicio en una ambulancia asistido de un médico, fue aún más allá. Aseguró que fue el ex ministro de Interior Jaime Mayor Oreja quien, a instancias de Ramírez, ordenó la retención en Correos de las grabaciones. Rodríguez Menéndez, que es uno de los siete acusados y que se defiende a sí mismo, reclamó al tribunal que cite como testigos a los periodistas de El Mundo Antonio Rubio y Manuel Cerdán y al fiscal general del Estado, Jesús Cardenal.