Economía española, del éxito al malestar
Después de cuatro años creciendo a un ritmo del 4% anual y creando empleo, la economía española empezó este año creciendo al 2% y destruyendo empleo. El malestar económico no afecta sólo a los 65.000 españoles que perdieron su empleo, según la EPA, o a los más de 100.000 parados que, en los últimos 12 meses, se añadieron a las cifras del Inem. La inflación casi dobla la de la Unión Europea y recorta los salarios de los trabajadores, los sueldos de los funcionarios y las pensiones. Los inversores no están más contentos, porque la Bolsa española no ha escapado al descenso de los demás mercados. ¿Podremos recuperar pronto la senda perdida del crecimiento y considerar este malestar como pasajero?
Empecemos por analizar las causas del éxito económico de los últimos años. El crecimiento español se debió a que el mundo experimentó una de las expansiones económicas más largas e intensas del último siglo y a que, además, España registró un mayor crecimiento relativo, más de un punto por encima del crecimiento europeo.