Centros semidesiertos en la enseñanza pública
Los centros de enseñanza pública de la Comunidad Valenciana aparecieron semivacíos en la jornada de ayer, con no más de un 6% del alumnado en sus dependencias. El hecho de que las universidades, en periodo de exámenes, los hubieran suspendido, sumado a la finalización del periodo lectivo en secundaria y a un día de fin de curso en primaria e infantil, contribuyeron al ambiente de huelga general. A pesar de que los sindicatos coinciden en sus estimaciones en cifras en torno al 70% y el 80%, referidas al profesorado que ha secundado la convocatoria, para la Administración la movilización 'apenas' -en expresión de Alicia de Miguel- tuvo incidencia en la enseñanza. No obstante, de forma extraoficial, algunos responsables de Eduación no ocultaban que sus cálculos se aproximaban más a las estimaciones realizadas por los sindicatos que al escueto 'apenas' de la portavoz del Consell.
Quien sí coincidía con ese 'apenas' es Educación y Gestión, patronal de la enseñanza concertada, aunque sólo tenía ayer datos de la cuarta parte de los 265 centros que engloba. Fete-UGT, sin embargo, cifraba en el 40% el seguimiento de la huelga en el conjunto de la privada, 'pese a las presiones recibidas'.
Tanto CC OO como el STEPV han criticado duramente el 'comportamiento antidemocrático' de los responsables de la consejería, al negar a los representantes de los trabajadores el acceso a sus instalaciones para informar a los trabajadores de las razones de la huelga. CC OO ha anunciado para hoy la presentación de una denuncia en el juzgado de guardia por este hecho. Para ambos sindicatos, la incidencia de la huelga hubiera sido mayor si la formulación de los servicios mínimos por la Administración no hubiera inducido a confusión, al hablar de un profesor por cada 'ciclo formativo' (algo inexistente), cuando, asegura el STEPV, 'en realidad se quería decir etapa educativa' (primaria e infantil). Algunos centros han interpretado 'ciclo educativo' (en Primaria hay tres) con el consiguiente incremento de los servicios mínimos. Esta medida ha hecho que en algunos centros rurales nadie pudiera seguir la huelga.
En las universidades, por otro lado, el paro ha sido clamoroso, con cifras situadas entre el 80% y el 90% de las distintas plantillas, confirmadas tanto por sindicatos como por gestores universitarios, y el 100% en la de Alicante, donde sólo trabajaron las cinco personas de los servicios mínimos. La repercusión, según fuentes sindicales, ha sido mayor que la huelga contra la LOU, a pesar de que el leit motiv de esta jornada de protesta está menos relacionado con la educación superior.
