Rolls-Royce se sube al carro de NewCo

Representantes de Gamesa Aeronáutica y Rolls-Royce fundamentalmente se encuentran desde hace tiempo tratando de encajar al fabricante británico de motores de aviación en la estructura accionarial de la nueva compañía aeronáutica -NewCo-, que aglutinará las actividades de las principales empresas españolas de este sector industrial.

Era de esperar, la hábil maniobra demostrada por los responsables de Gamesa, Sener y la SEPI el pasado mes de marzo con la agrupación de sus intereses en la industria aeronáutica española en una nueva compañía, a la que provisionalmente se denomina Newco, presentaba algunos flecos sin resolver.

La nueva empresa aeronáutica española nace con una facturación de 700 millones de euros y una plantilla de 3.000 empleados

El más importante, sin duda, era la participación de uno de los tres grandes fabricantes mundiales de motores de aviación, la británica Rolls-Royce, propietaria del 46,8% de Industria de Turbo Propulsores -ITP-. Esta compañía nació en 1989 con la unión de los intereses públicos y privados en la industria española de motores de aviación, tratando de recuperar el prestigio y el elevado nivel alcanzado por esta actividad durante la primera mitad del siglo pasado. Rolls-Royce ha sido durante este tiempo el socio tecnológico de referencia de ITP, a la que cedió en exclusiva incluso la fabricación de las turbinas de baja presión. La empresa española, sin embargo, junto a sus actividades de ingeniería y fabricación, ha conseguido también un importante desarrollo en otras actividades de montaje y mantenimiento con importantes contratos e incluso con implantación en el exterior con ITP York en el Reino Unido e ITR México.

Se presenta incluso como una de las candidatas con mayores posibilidades de adjudicarse el mantenimiento de la flota de Iberia una vez que la compañía aérea española decida subcontratar esta actividad.

La ausencia de Rolls-Royce y de la dirección de ITP en la gestación de NewCo hizo sospechar que se trataba de una operación financiera. Los responsables de Gamesa se han movido muy bien en el mercado bursátil durante los últimos tiempos, con importantes revalorizaciones hasta el pasado verano, en que se registró una gran caída en su cotización, de la que tratan de recuperarse poco a poco.

De cualquier manera, no es la primera vez que que estos actores se encuentran en escenarios parecidos. Rolls-Royce ha intentado en alguna ocasión hacerse con la mayoría del capital y, por tanto, del control de ITP, mientras que que Sener ha querido también en algunos momentos rentabilizar mejor su participación, tratando, entre otras cosas, de frenar las inversiones.

Ésta parece ser la mejor solución para todos. Los que apuestan por su dimensión financiera y los que creen, sin embargo, en las posibilidades de una importante industria aeronáutica nacional concentrada a partir de ahora con aportaciones claramente complementarias como las que suponen la ingeniería de Sener, la tecnología de Gamesa en fuselajes, la de ITP en motores y mantenimiento y el respaldo de Rolls-Royce.

La SEPI, que hace tiempo anunció ya sus intenciones de retirarse en el mejor momento posible, parece asistir como convidado de piedra a la mesa actual de unas negociaciones que, según fuentes de uno de los participantes, tratarán de hacer lo posible para que se cierren antes de las próximas vacaciones veraniegas.

Y no hay que olvidar la intención inicial de los creadores de NewCo de reservar un porcentaje importante de su capital para que cotice en Bolsa.

Los bancos -Deutsche Bank y ABN Amro- encargados de valorar los activos que aportan cada una de las partes y de allanar el camino han tenido que volver casi al principio del proceso para encajar la nueva pieza en el puzzle aeronáutico español.

En cuanto a los responsables de la nueva compañía, todo parece indicar que su presidente será el ex secretario de Estado de Defensa y actual presidente de ITP, Ricardo Martí Fluxá, mientras que para la vacante dirección ejecutiva de ITP se barajan dos nombres, según publica esta semana el diario Cinco Días: Amadeo Torres, director de la fábrica de Zamudio, y Carlos Olabe, director de la filial Preciscast.