Los horarios nocturnos se ajustarán sin afectar al cartel

La mañana fue dura ayer para los organizadores del Sónar. La noche anterior, la policía autonómica había realizado una inspección en la que comprobó que se cumplen todas las medidas de seguridad y sanidad exigidas por la normativa y que incluso se superan. No es éste, en cambio, el caso de los horarios, que según la legislación vigente tienen que ser más reducidos. La jornada del jueves del Sónar acabó a las seis de la madrugada del viernes, y no a las cuatro y media como estaba autorizado, por lo que se le ha abierto un expediente administrativo.

La organización del festival hizo público un comunicado en el que señala que 'garantiza el cumplimiento del programa por lo que respecta a las actuaciones de los artistas previstos' y que, de todas formas, hará lo posible para 'compaginar el respeto a los horarios autorizados con la flexibilidad necesaria para asegurar la buena marcha del festival'.

Un solo festival

En declaraciones posteriores, Enric Les Palau, Ricard Robles y Sergio Caballero, directores del Sónar, no quisieron ampliar la nota de prensa 'para evitar malas interpretaciones y no abonar polémicas innecesarias'. De todas maneras, recalcaron que el Sónar 'es un único festival que incluye actividades nocturnas y diurnas', y con respecto a los horarios, aseguraron estar dispuestos a hablar con todas las instituciones por si, con vistas a próximas ediciones, éstos se tienen que replantear.

Los horarios del festival eran perfectamente conocidos por los responsables autonómicos ya que el Departamento de Cultura es uno de sus patrocinadores. Este año contribuye con 99.063 euros (16,5 millones de pesetas)al presupuesto del evento y cede el espacio del Centro de Arte Santa Mónica para albergar el Sonarama. En anteriores ediciones, pese a estar sujetos a la misma legislación, se permitió tácitamente el alargamiento del programa.

El alcalde de Barcelona, Joan Clos, se refirió ayer a este hecho en unas declaraciones a la agencia Efe . 'El festival y el Gobierno catalán decidieron los horarios en una reunión conjunta', señaló el alcalde, en función de 'la necesidad de garantizar la seguridad y, al mismo tiempo, la libertad de expresión de uno de los primeros festivales mundiales'. Clos avanzó que pedirá explicaciones y dijo que espera que el 'acuerdo' sobre los horarios 'sea realmente fruto del consenso'.

Esta polémica puede empañar el hasta ahora ejemplar historial del festival en lo que a incidentes se refiere. De hecho, ante la preocupación de las autoridades sanitarias por las recientes muertes a causa de drogas sintéticas en marcrofiestas tecno, la organización aumentó sus ya numerosos controles de prevención.