_
_
_
_
Crítica:JUEGOS
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

En peligro de extinción

Con un argumento sencillo, el juego es una crítica a la industrialización sin mesura y a favor de la naturaleza

Oddworld Munch's Oddysee es el segundo episodio de una saga de juegos que, según sus creadores, tendrá cinco capítulos. En la primera parte titulada Oddworld Abe's Oddysee, el protagonista de la extraña raza mudokon, llamado Abe, debía rescatar a sus congéneres de las granjas hostiles donde realizaban trabajos forzados para los glukkons. Después llegó una especie de epílogo llamado Oddworld Abe's Exoddus, en el que Abe descubre que la destilería SoulStorm se nutre de los huesos de los mudokons para realizar sus brebajes.

Ahora se presenta el segundo capítulo de la saga, Oddworld Munch's Oddysee; pero esta vez únicamente para la recién estrenada consola de Microsoft, Xbox. Pese a que las otras entregas fueron para PlayStation y PC, en esta ocasión, de momento, no será así. Abe volverá a ser el héroe de la aventura. Su labor será recuperar la última lata de gabbiar, que son huevos de gabbit. Los gabbit son una especie anfibia en extinción. Durante años han sido utilizados para trasplantar sus pulmones a los empresarios glukkons con problemas respiratorios, después de una vida entregada a fumar sin descanso.

'Oddworld Munch's Oddysee'

Plataforma: XBox Género: Plataformas / Aventura Fabricante: Oddworld Inhabitants Precio: 69,95 Euros Recomendado: Mayores de 13 años Internet: www.oddworld.com www.xbox.com

Además de un nuevo argumento, Oddworld Inahbitans ofrece nuevos personajes, enemigos, habilidades y un entorno totalmente tridimensional que lo hace más atractivo.

Abe salvará mudokons y gabbits, y, en concreto, a un gabbit llamado Munch, de aspecto un tanto extraño pero con un gran corazón. El jugador podrá manejar alternativamente tanto a Abe como a Munch, con habilidades diferentes pero con las mismas teclas del mando de control para ambos personajes.

El manejo de los protagonistas es uno de los puntos fuertes del juego. Se caracteriza por un sentido del humor muy evidente que lo convierte en una aventura fresca y divertida. Por ejemplo, tanto Abe como Munch pueden comunicarse con sus semejantes pulsando las teclas del mando de control correctas. Esta forma de comunicación se llama gamespeak y el jugador podrá hacer que los mudokkons o los fuzzles le sigan, trabajen o ataquen según el botón accionado. Las voces de los personajes resultan simpáticas, y también algunos ruidos que salen del interior más íntimo de cada uno de ellos, como gases intestinales o eructos.

En esta entrega aparecen con más fuerza las máquinas expendedoras de bebidas, que permiten aumentar sus poderes. Además de tener un buen nivel de Spooce, que se obtiene recolectando estos pequeños arbustos, también se conseguirán nuevos poderes con los brebajes que extraigan de las máquinas de bebidas.

Con la ingestión de esta bebida, Abe y Munch podrán ser más rápidos, fuertes o saltarán más alto. Por ejemplo, con Expresso correrá más, con Rebote, saltará más alto, con ¡Zas! neutralizará a los enemigos y con Invisible pasará desapercibido.

En realidad, este juego de argumento sencillo es una crítica a la industrialización sin mesura, y por consiguiente un canto a favor del mundo natural que por desgracia está en peligro de extinción.

Los personajes demuestran claramente esta dicotomía: por un lado los mudokons y gabbits, de mirada tierna e ingenua, y por el otro los glukkons, vikkers o sligs, de actitud hostil y peores intenciones.

Siguiendo con la idea de proteger el medio ambiente, Oddworld Munch's Oddysee ofrece en su completo manual, totalmente traducido al castellano, algunos consejos para saber cuándo el jugador estará delante de un espacio pobre de salud. Si el jugador se encuentra con un área degradada, podrá reconstruirla activando algunas instalaciones. Ésta es una buena lección para los jugadores.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_